(AZprensa)
Una aplicación informática incorporada a unas gafas especiales nos permite
comunicarnos con el dentista mientras este realiza su trabajo y nuestra boca
permanece abierta e inmovilizada. De esta forma podemos preguntar, por ejemplo,
cuánto falta, qué es lo siguiente que va a hacer, pedir que haga una pausa,
etc., con lo cual aumentamos nuestro conocimiento sobre el trabajo que está
realizando el odontólogo y sobre el estado de salud de nuestra boca, al tiempo
que reducimos nuestro estrés que ya que podemos comunicarnos en todo momento
con el especialista mientras este realiza su trabajo.
¿Cómo
es posible estos? La empresa ICNOS ha incorporado a unas gafas que se coloca el
paciente una aplicación mediante la cual se nos ofrece una batería de preguntas
que podemos elegir y trasladar al odontólogo a través de un altavoz Bluetooth.
Y no sólo eso, sino que además, si la intervención es larga, podemos
distraernos mientras dura leyendo libros digitales, viendo vídeos e incluso
accediendo a las últimas novedades de Netflix.
De
momento sólo algunas clínicas disponen de estas gafas especiales pero sin duda
serán más las que las incorporen para hacer que los pacientes pierdan el miedo.
¿Quién dijo que ir al dentista no era divertido?
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