(AZprensa)
La financiación de proyectos de investigación en el campo de las enfermedades raras
articulada a través del CIBERER (Centro de Investigación Biomédica en Red de
Enfermedades Raras), se ha traducido en importantes avances. A medio plazo,
éstos pueden contribuir a avanzar en el desarrollo de nuevas formas de
diagnóstico y tratamiento para algunas de estas enfermedades poco frecuentes
(en su mayor parte -80 por ciento- de origen genético), así como impulsar
nuevos conocimientos científicos, técnicos o clínicos de gran utilidad para
comprender otras enfermedades comunes que afectan a gran parte de la población.
La
financiación de este tipo de proyectos de investigación sobre la epidemiología,
las causas y los mecanismos que producen las enfermedades raras son el “germen”
para el desarrollo de tratamientos efectivos, los denominados medicamentos
huérfanos, desarrollados por la incipiente industria biotecnológica.
Uno
de los avances más representativos conseguidos a través de distintos proyectos
financiados fue la prueba de concepto de una nueva estrategia terapéutica
basada en la corrección genética de células sanguíneas, en este caso
provenientes de células de piel de una ER de origen genético como es la Anemia
de Fanconi, que podría ser aplicable a numerosas enfermedades genéticas. Esto
ha permitido generar células sanguíneas corregidas genéticamente a partir de
células de la piel de pacientes afectados por una enfermedad rara de origen
genético: la anemia de Fanconi.
La
potencialidad de esta estrategia terapéutica para generar tejidos sanos a
partir de la propia piel de afectados por enfermedades genéticas, podría ser
también aplicable a muchas otras enfermedades de origen genético.
También
se podría citar en este sentido el descubrimiento de una variante genética que
protege frente a la denominada “Degeneración Macular Asociada a la Edad”
(DMAE), una enfermedad que afecta principalmente a los mayores de 65 años y es
la causa principal de la pérdida de visión entre los españoles.
En
España, aproximadamente siete millones de personas superan los 65 años de edad,
siendo potencialmente susceptibles de padecer esta enfermedad que supone un
alto grado de discapacidad.
También
ha habido avances en el síndrome de Usher, una ER hereditaria que implica
trastornos de la audición, de la visión (llamado retinosis pigmentaria) y, en
ocasiones, problemas de equilibrio, así como la supuso un gran avance la creación
de un microchip de ADN que permite el diagnóstico de la enfermedad en un mayor
porcentaje de pacientes y en menor tiempo.
Cabe
citar igualmente la identificación de una alteración cromosómica estructural
aparentemente equilibrada (sin pérdida ni ganancia de material genético) que se
asocia a la presencia de un defecto congénito facial, denominado secuencia de
Pierre Robin; el descubrimiento de que mutaciones en un microARN provocan una
enfermedad monogénica que tiene como consecuencia pérdida auditiva progresiva o
la detección de varios genes que elevan la susceptibilidad a desarrollar cáncer
de mama.
Vicente Fisac es periodista y escritor. Todos sus libros están disponibles en Amazon: https://www.amazon.com/author/fisac
“Elogio de la síntesis”: https://amzn.eu/d/0LWWy6q
Vicente Fisac es periodista y escritor. Todos sus libros están disponibles en Amazon: https://www.amazon.com/author/fisac
“Elogio de la síntesis”: https://amzn.eu/d/0LWWy6q
No hay comentarios:
Publicar un comentario