(AZprensa)
Los últimos años en la industria farmacéutica se han caracterizado por
numerosos despidos, tras lo cual se volvía a contratar a otros empleados
(pero siempre en menor número) con unos salarios más bajos, para que hicieran ese
mismo trabajo. Pues bien, a pesar de eso, la industria farmacéutica sigue
siendo en la actualidad la que paga los salarios más altos, según un informe
realizado por la consultora Willis Towers Watson.
En
el caso de España, por ejemplo, los salarios en este sector son un 10 por
ciento más altos que la media nacional, y se sitúan en una media de 40.404
euros anuales para los hombres y 36.344 euros para las mujeres, si bien esta
desigualdad de género –evidente a todas luces- sigue siendo menor que en otros
sectores industriales.
Esta
diferencia de género también se observa en la proporción de trabajadores, ya
que el 62 por ciento de los mismos son hombres frente al 38 por ciento de
mujeres, y si hablamos de puestos de dirección, la diferencia es mucho más acusada:
sólo una tercera parte de los puestos en los cuadros directivos son ocupados
por mujeres. Ahora bien, en comparación con años anteriores, la inserción
laboral de las mujeres ha aumentado, sobre todo en la franja de edad de los 40
a 49 años.
En
comparación con el resto de Europa, España continúa fijando la mayor parte de
la cuantía de las nóminas en la retribución fija, sin embargo, la retribución
variable está ganando cada vez más peso. A la cabeza del cobro de la
retribución variable se sitúan los perfiles de ventas de farmacia que supone un
22 por ciento de su salario.
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