Anochecer, silencio

(AZprensa) Y cuando llega la noche, el espíritu se libera y vaga libre por el espacio. Exploramos un nuevo mundo de emnociones y sentimientos, de recuerdos y sensaciones, de anhelos y esperanzas. 

Pero la noche es una estación de descanso, un alto en el camino necesario, imposible de evitar. 

Por eso, al llegar la noche, dejamos salir lo que hay dentro de nosotros y nos confiamos al sueño en la espera inevitable del mañana…

ANOCHECER, SILENCIO...
 
Anochecer, silencio.
Palabras
que sentimos
y callamos;
Nadie une
nuestras voces
y se pierden a lo lejos.
Nunca llegamos
al instante ansiado.
Cansa esta lucha,
trabajo muerto
de ruidos.
Creemos
para no desfallecer
en la espera
de mañana.
Anochecer, silencio.
¿Qué hay más allá
de las montañas rojas
del deseo?
Apenas si se ven
las nubes blancas,
los cerros, los valles
oscuros
y el agua limpia
que alimente
los deseos.
Durmamos, amor;
descansemos.
Pronto; pronto llegará
el instante de amor
que ahora irrita
nuestros cuerpos.
Pronto se saciará
esta sed interminable
y se mezclarán
nuestros cabellos.
Descansa ahora;
duerme, mi amor.
Un día más,
un día menos.
Anochecer, silencio.
 

Vicente Fisac es periodista y escritor. Todos sus libros están disponibles en Amazon: https://www.amazon.com/author/fisac
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