La pregunta que no han hecho a Joan Ramón Laporte

El farmacólogo Joan Ramón Laporte lleva más de dos décadas atacando a los laboratorios farmacéuticos. Cualquier periodista que se acerque a él obtendrá respuestas como estas, tal como puede comprobarse en cualquiera de las entrevistas realizadas:

“Las compañías exageran los efectos beneficiosos de los medicamentos que comercializan, y minimizan, e incluso niegan, los efectos indeseados graves”.

“Las farmacéuticas en España gastan más de 2.500 millones de euros en promoción, es decir, por comprar decisiones: casi el triple del dinero que en investigación”.

“Los efectos indeseados de medicamentos son la cuarta causa de muerte”.

“Las autoridades no se preocupan por saber qué efectos positivos y negativos tienen los medicamentos”.

“Son las compañías farmacéuticas las que controlan a los estados, y no a la inversa, como debería ser”.

“Hay un conjunto de leyes y normas pensadas para favorecer a las compañías farmacéuticas”.

“Los lobbies farmacéuticos compran a políticos, reguladores, profesionales sanitarios y asociaciones de pacientes”.

“Los medicamentos son la tercera actividad económica mundial después del tráfico de armas y el narcotráfico”.

Sin embargo hay una pregunta que no le han hecho y que, por tanto, desde el “Diario El Inefable” se la vamos a formular:

Si tan deleznables son los laboratorios farmacéuticos, ¿por qué lleva más de dos décadas colaborando con ellos y cobrando en consecuencia unos buenos honorarios? ¿Por qué escribe libros para ellos (cobrando, claro)? ¿Por qué participa en sus reuniones, mesas redondas, etc. (cobrando, claro)? ¿Por qué forma parte de algunos de sus comités, Fundaciones, etc. (cobrando, claro)?

De igual forma, desearíamos formular a los directivos de los laboratorios farmacéuticos una pregunta:

¿Por qué siguen contando con esta persona, encargándole trabajos y pagándole por ellos, cuando saben que tan pronto tenga ocasión los pondrá a parir? ¿Es que no hay otros farmacólogos en España?

Realmente, cuando Joan Ramón Laporte dice que los laboratorios farmacéuticos gastan más en promoción que en investigación (lo cual no es cierto) quizás está pensando en los altos emolumentos que perciben tanto él como otros similares a él.