El tratamiento antipsicótico puede tener efectos secundarios
sobre casi todos los aspectos de la función cognitiva, y estos efectos son particularmente
evidentes en las áreas de la memoria y de la atención. El deterioro cognitivo
está reconocido como una consecuencia de la enfermedad psicótica que puede
empeorar incluso el tratamiento habitual, además de tener un efecto profundo
sobre la actividad social y ocupacional del paciente, y por tanto limitar su actividad
y calidad de vida.
Actualmente el incumplimiento del tratamiento motivad por la
acción de los efectos secundarios , es uno de los principales problemas a
combatir, sobre todo cuando ello provoca la aparición de brotes de la enfermedad.
El enfermo requiere visitas periódicas para el control de la
medicación y sus efectos secundarios; así como así como orientación tanto para él
como para su familia. En numerosas ocasiones, además, requiere intervenciones de
tipo rehabilitador orientadas a favorecer su integración social.
No hay comentarios:
Publicar un comentario