domingo, 31 de agosto de 2014

Sudar cuesta un riñón

“El calor no afecta directamente al riñón, produce alteraciones que tienen consecuencias sobre el riñón. Por ejemplo, una vasodilatación intensa (enrojecimiento de la piel) puede llegar a bajar la tensión”, así lo comenta el Dr. Francisco Ortega, del Servicio de Nefrología del Hospital Central de Asturias, al repasar diversas cuestiones típicas de la época veraniega.

“Las personas, al sudar, perdemos agua y electrolitos. Los ancianos, sobre todo, son más susceptibles a deshidratarse porque tienen menos volumen de agua en su cuerpo. La deshidratación hace que baje el volumen circulatorio, llegue menos sangre a los riñones y sus células empiecen a morir”.

“Los pacientes con insuficiencia renal crónica deben tener cuidado porque el sol les seca la piel, deshidratándola. Aparece entonces el prurito o picor. Después de tomar sol es necesario ponerse una crema hidratante. Las personas trasplantadas, como reciben medicaciones inmunosupresoras, también deben tener mucho cuidado con el sol, ya que poseen más tendencia a la aparición de tumores. Es, por tanto, recomendable exponerse poco al sol o hacerlo por tiempos limitados y siempre con protección solar”.

En opinión del Dr. Ortega, “hay que tener cuidado con las bebidas gaseosas, ya que si se beben burbujas se toma también bicarbonato y sodio. Es mejor beber agua. También es bueno el té. Respecto a los zumos, hay que beberlos con cuidado, ya que tienen potasio. Los zumos naturales tampoco son muy recomendables debido al potasio”.

Según el Dr. Fernando Álvarez-Ude, director Médico del centro de hemodiálisis “Los Olmos” de Segovia, “los helados de chocolate, turrón, nata, etc. deben evitarse o reducirse porque tienen potasio o porque al tener mucho azúcar aumentan la sed. Los polos (hielo con colorante) se aconseja sean de pequeño tamaño y que tomen uno o dos al día (son ideales los hechos en casa con agua y zumo de limón).

En cuanto a la cantidad de hielo a tomar en verano, comenta que “no hay límites a la práctica de saborear hielo o poner hielos en los refrescos, salvo los que dicta la conveniencia de no ingerir demasiado líquido”.

Medicamentos y calor
“Los efectos del calor pueden sumarse a los efectos de la medicación que toman los pacientes renales. Los medicamentos antihipertensivos, al bajar la tensión arterial, deben manejarse con más cuidado cuando hace mucho calor. Hay medicaciones que producen fotosensibilidad y favorecen los efectos de los rayos de sol sobre las personas”.

sábado, 30 de agosto de 2014

Verano, calor y volante

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha advertido que conducir con una temperatura interior del vehículo superior a los 35 grados es "igual de peligroso que beber varias cañas", ya que con ese calor el conductor deja de percibir una de cada cinco señales de tráfico y sus errores aumentan.
Por ello, la asociación de consumidores recomienda usar si es posible el aire acondicionado y no consumir comidas abundantes ni ricas en grasas antes de conducir. Así, explica que una digestión pesada, combinada con el calor del verano, "incrementa peligrosamente la sensación de somnolencia".

Por su parte, Asociación Española de Prevención de Accidentes de Tráfico (APAT) recuerda que "tanto calor" como el que se está viviendo en buena parte de la Península "provoca cierto malestar personal, agotamiento, sueño, cosas que son incompatibles con una conducción dedicada y una buena concentración". "Es decir, incompatibles con una conducción segura", subraya.
En este sentido, apunta que los despistes son la primera causa de accidente de tráfico e indica que "la distracción no viene porque sí", sino que se produce porque el conductor "no le da importancia a conducir en buenas condiciones físicas y mentales". "El calor en el coche, el cansancio acumulado, la falta de humildad, el 'a mi no me pasa' o muchas más excusas", señala.

Para combatir el calor, los expertos recomiendan hidratarse frecuentemente, parar a descansar en caso de sentirse somnoliento o cansado o bajar la ventanilla del coche, si es que no se dispone de aire acondicionado.

Además, la OCU aconseja no utilizar el manos libre del móvil, ya que, aunque no está prohibido, "no es aconsejable". "Atender una llamada resta capacidad de atención a la carretera y ralentiza cualquier reacción del conductor en caso de peligro", explica la asociación que también recomienda no estar mirando la pantalla del GPS "cada dos por tres" y "dejarse guiar únicamente por las instrucciones de voz".

Otros consejos de la OCU son parar y descansar cada dos horas de conducción, no superar los límites de velocidad establecidos, planificar el viaje, revisar el estado del coche antes de salir o respetar la distancia de seguridad. Para calcular cuál es el espacio que hay que dejar libre con el coche de delante, la asociación insta a contar 1.001 y 1.002 cuando el otro vehículo pase por un punto de referencia. Lo que se tarda en efectuar esa cuenta equivale a 25 metros si se circula a 50 km/h y a unos 70 metros si se va a 120 km/h.

Respecto al alcohol, la OCU recuerda que la tasa máxima de alcohol en sangre es de 0,5 g/l (0,25 mg/l de alcohol en aire espirado), lo que equivale a tomar dos cervezas y señala que el nivel no empieza a bajar hasta una hora y media después de la ingesta.

viernes, 29 de agosto de 2014

Verano e ingesta de objetos extraños

El jefe de cirugía pediátrica del Hospital Infantil Virgen del Rocío de Sevilla, Juan Carlos De Agustín, ha alertado de que en estas vacaciones se "dispara" el riesgo de ingesta de objetos peligrosos para el tracto intestinal "que, como los imanes, tienen un riesgo real y efectivo de provocar desgarros y perforaciones en las paredes del intestino".

El Dr. Juan Carlos De Agustín describió un caso tratado en este centro en el que se tuvo que reconstruir parte del intestino a un pequeño que había ingerido por accidente varios trozos de imán, un metal "que provoca una presión continua en las paredes del intestino, pudiendo llegar el caso de perforarlo, lo que provoca una peritonitis".
"La ingesta de dos o más trocitos de imán, que pueden desprenderse de juguetes que contengan este metal, suele provocar una o varias perforaciones en el intestino", alertó este especialista, quien admitió que, "si éste está muy inflamado, no hay más remedio que practicar una derivación intestinal, es decir, sacar el intestino fuera".
De hecho, resaltó que, "aunque sean pocos casos" --reconoció que en dos años tan sólo se han notificado tres casos en Sevilla--, los efectos que provoca son tan graves "que a los propios pacientes y sus familiares les acarrea traumas psicológicos tremendos, como por ejemplo ver que el niño a tan corta edad ya tiene que hacer sus deposiciones en una bolsita" de acceso.
Por ello, insistió en la importancia de que los padres "busquen este tipo de juguetes y los quiten de la vista de los niños" o, en su defecto, "que al menos comprueben que están en buenas condiciones".

Así, y tras enfatizar que es en el período vacacional cuando se suelen detectar más casos por ingesta de objetos y líquidos corrosivos, "debido a que es cuando los niños tienen más tiempo y juegan más", advirtió de que si estos casos "no nos llegan relativamente rápido al hospital, o bien no somos capaces de extraer el imán desde el esófago, el riesgo a que pase al estómago o al duodeno es mayor y, con ello, la lesión que va a provocar en esas zonas".
En este sentido, sostuvo que en estos casos se tiene que practicar una operación, "que puede ser compleja, con resultados difíciles de controlar o incluso provocar en algunos casos hasta la muerte, como ha ocurrido en Estados Unidos".

Actuación temprana y dificultad en los síntomas
Señaló que el tiempo que transcurre entre que el imán pasa al estómago o al duodeno "es sólo de horas", por lo que aclaró que la extracción debería de realizarse "máximo en un plazo de tres horas".
"El problema es que muchas veces no sabemos, hasta que le hacemos una radiografía, si el dolor abdominal del niño se debe por ejemplo a un principio de apendicitis o a que ha ingerido alguna pieza imantada", prosiguió este especialista, quien detalló que también es vital saber "si ha ingerido sólo una pieza o varias, y si se han ingerido en un intervalo de tiempo corto, ya que en ese caso el problema radica en que las piezas se van a atraer en el tubo digestivo, causando su perforación".
En estos casos, admitió, "el problema es que nos llegan cuando ya han pasado horas o incluso días de que el niño ingiriera la pieza o piezas imantadas, ya que el cuadro clínico a priori es asintomático y no da la cara hasta que se produce el dolor abdominal provocado por una peritonitis" ya en ciernes. De hecho, admitió que el tiempo medio entre que se ingiere estos imanes y se produce una peritonitis "suele ser de unos cuatro o cinco días".

Tipo de intervenciones
Así, la única forma de atender estos casos ya consumados es la intervención, ya sea por cirugía abierta, "en el peor de los escenarios", o por endoscopia, que es mejor, ya que uno se recupera de forma más satisfactoria de la cirugía. Así, y a modo de ejemplo, detalló que si los objetos pasan más allá del estómago o el duodeno, "casi siempre tenemos que acudir a la cirugía tradicional abierta".
Además, resaltó que si sólo se ingiere un imán "no causa mayor problema, ya que se suele expulsar por las heces", no así en el caso de que se ingiera más de un imán. "En el caso de un sólo imán solemos esperar un mes, aunque con revisiones de vigilancia cada semana o dos semanas, para ver si lo expulsa de forma natural con las heces", prosiguió De Agustín, quien agregó que transcurrido ese plazo "entonces se lo extraemos por vía endoscópica".

Casos por vía aérea, ingesta de pilas y líquidos corrosivos
Sobre estos casos, de los que dijo que son menos frecuentes, advirtió que son aún más peligrosos que la ingesta de imanes por vía oral, "ya que su atención no puede apenas demorarse por el riesgo alto de que el cuerpo extraño se quede alojado en esta vía, corriendo un grave peligro de asfixia".
"Los casos que obstruyen completamente la vía aérea, salvo que los servicios de urgencia llegan a tiempo y le practiquen una traqueotomía, no hay mucho que hacer", reconoció.
Respecto a la ingesta de pilas, De Agustín explicó que el procedimiento general es el de extraerlas "siempre que se pueda", puesto que estos objetos "provocan quemaduras graves, debido al cortocircuito eléctrico que se producen entre los polos + y - de la pila, al tocarse a través de las paredes mucosas del esófago y generando así una carga eléctrica".
En el caso de las ingesta de pilas de botón, alertó de que suelen ser "de mala calidad", por lo que pueden abrirse en el tubo digestivo "y soltar su contenido, pudiendo causar también perforaciones y quemaduras".
En cuanto a potenciales casos por ingestión de sustancias cáusticas o líquidos corrosivos que causan quemaduras, hizo especial énfasis en los detergentes líquidos de lavabajillas de tipo industrial. "Hay que evitar que estos líquidos se pasen de las garrafas en las que vienen a botellas pequeñas para un manejo más cómodo si hay niños cerca, porque es ahí donde se suele encontrar la causa de estos accidentes domésticos", argumentó.
Entre los principales problemas que provoca esta ingesta, se encuentran "la perforación del esófago, del estómago e incluso la muerte por una perforación masiva". En los casos menos graves, provoca un estrechamiento del esófago, "aunque luego tenemos que hacer intervenciones para dilatarlo, algo que a veces nos lleve dos y tres años".

En algunos otros casos, concluyó, "hemos tenido que reemplazar el esófago por un trasplante de colon o de intestino para poder quitar ese esófago dañado".

jueves, 28 de agosto de 2014

Verano, lentillas y piscina

El Colegio Nacional de Ópticos-Optometristas (CNOO) ha recomendado extremar las precauciones higiénicas, especialmente en los usuarios de lentes de contacto, las personas alérgicas o que padezcan ojo seco y los niños, que pasan más tiempo en el agua y bucean con los ojos abiertos en piscinas y playa.

El presidente del CNOO, Juan Carlos Martínez, ha explicado que los usuarios de lentes de contacto son uno de los colectivos con más riesgo de infección ocular en las piscinas.
Para prevenir la irritación y los contagios en el ojo, "lo mejor es utilizar gafas para nadar y bucear encima de las lentes de contacto y evitar el contacto de los ojos con el agua", ha señalado. En el caso de las piscinas, "el calor y las sustancias químicas presentes en el agua suelen encontrarse detrás de muchos casos de conjuntivitis irritativas, víricas o bacterianas propios de estas fechas", ha explicado Martínez.

Según ha indicado el óptico, las conjuntivitis irritativas a menudo están provocadas por un exceso de cloración y la presencia de otras sustancias químicas en el agua, así como por el sol. Por su parte, las conjuntivitis víricas y bacterianas pueden deberse a unos niveles de cloro incorrectos.

A estas medidas, hay que añadir el uso de gafas de sol para evitar la irritación por radiación ultravioleta y no compartir toallas con el fin de reducir el contagio de infecciones. Así, ha subrayado que "el uso de gafas de sol contribuye a prevenir muchos casos de conjuntivitis y otras enfermedades oculares".

Además, Martínez ha afirmado que "los niños, debido a que sus ojos son más vulnerables por encontrarse aún en desarrollo, deberían utilizar gafas de sol cuando vayan a la piscina, a la playa o a cualquier otro sitio donde estén expuestos a las radiaciones más extremas del sol".

Igualmente, ha recordado que cada vez existen más evidencias de que "la exposición a las radiaciones ultravioletas durante los primeros años de vida está directamente relacionada con el desarrollo de cataratas, la degeneración macular y otras alteraciones."

miércoles, 27 de agosto de 2014

Verano, comida y baño

La tradicional espera de una o dos horas después de comer antes de darse un baño no es una leyenda sino una de las recomendaciones que hacen los médicos de familia a todos aquellos que vayan a la piscina o a las playas en verano. Además, piden que se extremen las precauciones con el consumo de alcohol, otra de las causas de ahogamientos en los meses estivales.

Según precisa el secretario de la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (semFYC), el doctor Salvador Tranche, los famosos cortes de digestión son en realidad "síncopes de hidrocución que se producen al variar bruscamente la temperatura del cuerpo después de entrar en el agua; se dan tras una comida copiosa, pero también pueden aparecer tras realizar un ejercicio intenso o después de pasar mucho tiempo al sol.

"Es un cuadro poco frecuente --asevera --en el que se pierde la conciencia por falta de riego sanguíneo en el cerebro y puede acabar con un ahogamiento". Por este motivo, "es recomendable esperar entre una y dos horas después de comer para ir al agua y, cuando se haga, intentar que sea de forma escalonada, para que el organismo se habitúe al cambio de temperatura sin problemas", indica el doctor Tranche.

Según explica el médico de familia de semFYC, "los ahogamientos se producen sobre todo en niños por debajo de 3 ó 4 años, pero luego hay un bloque entre los 15 y los 25 años donde los fallecimientos en el agua suelen estar relacionados con la ausencia de sensación de riesgo y el consumo de alcohol".

"El alcohol favorece la deshidratación --asegura-- y una de las consecuencias de ella son los calambres, que en el agua pueden provocar una sensación de pánico, un cierre de la glotis y una pérdida de conciencia dentro del mar, la piscina o el río". "Parece mentira ver ahogamientos de adolescentes ebrios en zonas donde prácticamente no cubre, todo ello fruto de la pérdida de conciencia y la falta de reacción", dice este experto.

En cualquier caso, estos expertos recuerdan también que durante los meses de verano es muy importante "no confiarse en ningún momento" mientras los niños estén en el agua y mantener una "vigilancia constante" sobre ellos, aunque lleven flotador o "manguitos" porque "en cualquier momento, el niño puede tragar un poco de agua, ponerse nervioso y asustarse; beber cada vez más agua y terminar ahogándose". "No se les debe perder de vista nunca, especialmente en horas como las de la siesta y más aún si están en la playa o el río, donde la corriente puede arrastrarlo", comenta el doctor Tranche.

martes, 26 de agosto de 2014

Verano y enfermedad de Chron

Cuando se prepara la maleta, los enfermos de Crohn deben poner en el equipaje de mano un breve informe explicando su enfermedad y el tratamiento pautado. También es importante llevar suficiente medicación para todo el viaje, y tener presentes las normas establecidas en los aeropuertos para la facturación de las maletas, especialmente en lo relativo a fármacos

La imprevisibilidad de los brotes puede llevar a condicionar la predisposición a los viajes y a que los enfermos de Crohn disfruten con normalidad de sus vacaciones, por ello desde la Confederación de Asociaciones de Crohn y Colitis Ulcerosa (ACCU) han aconsejado este martes a los pacientes de esta enfermedad planificar detalladamente sus viajes.

"Dado que no hay dos enfermos de Crohn iguales, difícilmente, existen soluciones universales", han señalado, por esto "será cada enfermo quien, consultando con su médico, pueda preparase del mejor modo posible ante la perspectiva de un viaje".
En cualquier caso, la planificación y otras recomendaciones básicas generales son la clave para que los enfermos de Crohn puedan disfrutar sin problemas de su viaje. Cuando se prepara la maleta, los enfermos de Crohn deben poner en el equipaje de mano un breve informe explicando su enfermedad y el tratamiento pautado. También es importante llevar suficiente medicación para todo el viaje, y tener presentes las normas establecidas en los aeropuertos para la facturación de las maletas, especialmente en lo relativo a medicamentos.

Además, han recordado que si se tienen que introducir jeringas o agujas en el avión es recomendable llevar un informe con la receta, para evitar problemas. Asimismo, han aconsejado llevar el informe y la medicación en el equipaje de mano. Los expertos también han advertido que no se debe olvidar nunca el tratamiento farmacológico aunque la enfermedad se encuentre en etapa de remisión.

En principio no existe ninguna limitación para los viajes a zonas tropicales o poco desarrolladas, siempre que se cumplan las recomendaciones sobre vacunación necesarias en cada zona. Unas semanas antes de marcharse es necesario acudir al médico y consultarle la compatibilidad de la vacuna con su tratamiento.

En países tropicales o subdesarrollados han recomendado beber siempre agua embotellada y alimentos bien cocinados, intentar no comer alimentos crudos, evitar los helados, pelar toda la fruta y extremar las medidas higiénicas para evitar la diarrea del viajero. Es una enfermedad muy frecuente en población general que, aunque no se conoce con exactitud si es más frecuente en los pacientes con Enfermedad de Crohn, puede llevar a confusión con un brote y el consiguiente tratamiento. Asimismo, determinados microorganismos pueden provocar o empeorar un brote de la enfermedad.

También es importante evitar el café y el té por ser bebidas estimulantes que se pueden tolerar mal, sobre todo durante los brotes de la enfermedad, ya que pueden irritar el intestino.

lunes, 25 de agosto de 2014

Verano y fertilidad

La infertilidad es un problema que crece constantemente y más de 40 países se suman a las campañas que cada año pone en marcha la American Fertility Association (AFA) de Estados Unidos, para el cuidado de la fertilidad. El período de vacaciones, es una época propicia gracias a la ausencia de estrés y la disponibilidad de tiempo libre. Para ayudar a concebir un hijo de manera natural a aquellas parejas que desean tenerlo –en España cerca del 15% de las parejas tienen problemas para lograrlo- la AFA ha elaborado un decálogo.

Decálogo para proteger la fertilidad:
1.- No retrase demasiado la maternidad. La edad es uno de los condicionantes más importantes a la hora de tener hijos y la mujer cada vez se plantea la maternidad más tarde debido, en gran parte, a la incorporación al mundo laboral. Pero es a partir de los 35 cuando se comienzan a tener más dificultades para ser madre, ya que por cada año que se retrasa la maternidad las posibilidades de quedarse embarazada se reducen un 5%, debido a disminución de la calidad ovocitaria y la reserva de óvulos.
2.- No fume. Las mujeres que fuman, sobre todo más de 10 cigarrillos diarios, requieren más medicación con gonadotropinas para estimular la ovulación. Además, hay más ciclos cancelados y las tasas de implantación son más bajas. Hay también más posibilidades de sufrir abortos, gestaciones extrauterinas, en el caso de fumar más de 20 cigarrillos al día, y otras complicaciones como placenta previa, prematuridad, muerte súbita del lactante, así como una mayor demanda asistencia durante la lactancia.
3.- Reduzca el consumo de alcohol. Si bien el efecto del consumo de alcohol en las mujeres no ha sido claramente establecido, es recomendable reducir su ingesta, ya que algunos expertos aseguran que 2 o más bebidas alcohólicas al día pueden afectar negativamente a la fertilidad. Obviamente, el consumo de alcohol debe cesar por completo durante el embarazo.
4.- Vigile su peso. Las mujeres que quieran conseguir un embarazo deben evitar en la medida de lo posible la obesidad y, por tanto, no consumir alimentos elaborados con harinas refinadas, ya que aumentan los niveles de insulina que interfieren negativamente en la ovulación. Así, es recomendable sustituirlos por harinas integrales y evitar alimentos como la bollería industrial. Por otra parte, es aconsejable consumir alimentos con alto contenido en antioxidantes y ácidos grasos omega-3, ya que pueden mejorar la calidad de los óvulos. Está presente en alimentos como el pescado azul o la mayoría de los vegetales. Pero igual de perjudicial para la fertilidad es la pérdida drástica de peso o enfermedades como la anorexia nerviosa, ya que la producción de la hormona GnRH puede verse reducida y, en consecuencia, la ovulación puede volverse irregular. Además, el bajo peso puede también afectar a la disponibilidad del revestimiento uterino para permitir que el embrión pueda implantarse en él.
5.- Disminuya la ingesta de café. Diversos estudios aseguran que más de tres tazas de café contribuyen negativamente a la fertilidad femenina. Además, reduce la absorción del calcio por parte del organismo.
6.- Relájese. El estrés puede bajar el nivel de gonadotropinas y aumentar los niveles de prolactina, lo que puede desencadenar anovulación (ausencia de ovulación). Además, en mujeres que padecen un alto nivel de ansiedad y estrés las tasas de embarazo bajan y aumentan las posibilidades de sufrir un aborto.
7.- Practique deporte suave. Que el deporte es beneficioso para la salud y la calidad de vida de la mujer es algo que, hoy por hoy, nadie lo pone en duda. Previene enfermedades coronarias, facilita la amplitud respiratoria, elimina grasas y mejora el rendimiento físico, entre otras virtudes. Sin embargo, si está pensando en tener un hijo es recomendable bajar el ritmo y la intensidad del ejercicio y practicar deportes suaves como caminar o nadar.
8. - Cuidado con los fármacos que toma. Si está tomando medicamentos o sufre alguna enfermedad consulta a su médico antes de tratar de quedarte embarazada. Algunos fármacos, afectan a la fertilidad y otros pueden causar defectos en el feto e incluso abortos.
9. - El hombre también debe cuidarse. La calidad del semen ha decaído en los últimos años debido, en gran medida, al ritmo de vida y las condiciones ambientales. Para mantener una buena calidad espermática los expertos recomiendan evitar el consumo de tabaco, ya que puede influir en la reducción de la concentración espermática, de su movilidad y en alteraciones en su morfología, así como en un aumento de la fragmentación del ADN del gameto o en problemas de erección. Asimismo, se debe cuidar la alimentación pues la obesidad en el hombre puede causar también disfunción eréctil y una disminución de la frecuencia de las relaciones sexuales. El estrés, el exceso, los horarios prolongados de trabajo, la contaminación ambiental, la exposición al calor, el alcohol, e incluso el uso de ropa interior ajustada son otros de los factores que pueden debilitar el esperma.
10.- Si en un año no lo consigue, acuda al especialista. Cerca del 15% de las parejas españolas en edad fértil tienen problemas a la hora de concebir un hijo de manera natural y, sin embargo, la mitad de estas parejas infértiles no acude al médico para intentar solucionar su problema. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que si después de un año intentando tener un hijo de forma natural no se ha conseguido, se debe acudir a un especialista. En nuestro país, existen clínicas de reproducción asistida que le aconsejarán el tratamiento de fertilidad más adecuado para su problema.

domingo, 24 de agosto de 2014

Verano, desayuno y deporte

Los expertos en nutrición nos recuerdan una y otra vez que el desayuno es la comida más importante del día y no sólo debe ser abundante, sino también variado y equilibrado a través de una combinación de lácteos, pan, cereales y frutas. En este sentido, aconsejan desayunar, como mínimo, una hora antes del entrenamiento, ya que el esfuerzo físico y el proceso de digestión suponen un gasto de energía. También recomiendan a los jugadores desayunar sin prisas. Es preferible levantarse 10 minutos antes, sentarse y masticar adecuadamente los alimentos para una digestión más fácil.

“Un consumo energético adecuado para un futbolista de élite está en torno a las 3.500 Kcal. al día. Se ha calculado que en el desayuno debemos consumir un 25% del aporte calórico total diario. Por tanto nos movemos en cifras cercanas a las 800 Kcal.”, asegura Carlos Díez, director de los Servicios Médicos Sanitas - Real Madrid.

Se recomienda asimismo cinco comidas a lo largo del día para favorecer la asimilación de todos los nutrientes. La distribución que debe seguir un futbolista profesional en cuanto al aporte calórico en su dieta sería: un consumo de hidratos de carbono cercano al 55-60%, un 25-30% de lípidos y un 12-15% de proteínas.

Los alimentos deberían distribuirse en 5 comidas diarias:
·   Desayuno: 25-30% del valor calórico diario.
·   Almuerzo: 10-15% del valor calórico diario.
·   Comida: 25-30% del valor calórico diario.
·   Merienda: 10-15% del valor calórico diario.
·    Cena: 20-25% del valor calórico diario.

La leche y el café 
La recomendación a los jugadores es que el desayuno incluya leche desnatada para evitar el excesivo aporte graso, y si es posible enriquecida con vitamina A, D y calcio. El aporte diario debería ser como mínimo de tres raciones (0,75-1 litro). Conviene tener en cuenta que un yogur equivale a medio vaso de leche. En la edad adulta, la leche favorece la conservación de la masa ósea por lo que disminuir su consumo puede producir osteoporosis y fracturas.

En cuanto al café, si se toma, los especialistas recomiendan moderación, ya que es una importante fuente de cafeína, un estimulante. Hay que tener cuidado en no sobrepasar las 2-3 tazas diarias, pues un consumo excesivo podría acarrear efectos negativos sobre el corazón y el sistema nervioso. En cambio, los zumos recién exprimidos son, al igual que la fruta, un alimento indispensable en el desayuno por su aporte de vitaminas, minerales y antioxidantes.

El desayuno antes y después de un partido
El día del partido el desayuno varía, explica el doctor Díez, “en tanto en cuanto tratamos de llenar los depósitos de glucógeno con el fin de poder utilizarlos durante la competición. Por eso procuráramos que los deportistas realicen un desayuno más rico en hidratos de carbono y basado en alimentos fáciles de digerir”. Con el desayuno del día después de un partido el objetivo es otro. “Con él tratamos de favorecer la rehidratación con el fin de conseguir una pronta recuperación. Por eso recomendamos aumentar la ingesta de frutas y zumos”.

sábado, 23 de agosto de 2014

Verano y enfermedades crónicas

El seguimiento continuo y personalizado por parte del médico y el cumplimiento del tratamiento establecido por parte del paciente son factores fundamentales a la hora de hacer frente a cualquier dolencia crónica, sobre todo durante el período de las vacaciones de verano. Para ello se necesita un paciente bien informado

Las enfermedades crónicas significan uno de los problemas sanitarios más graves de los países desarrollados, pues afectan a más del 25% de la población y se han convertido en la principal causa de fallecimiento. Según la Organización Mundial de la Salud, en 2005, murieron en el mundo 58 millones de personas, de las que 35 millones fallecieron como consecuencia de una enfermedad crónica. Además, 14 millones de españoles padecen una patología de este tipo, que representan un 70% del gasto sanitario en España, generan el 80% de las consultas de primaria y el 60% de las hospitalizaciones.

¿Qué es una enfermedad crónica?
Los expertos definen la enfermedad crónica como aquella patología de larga duración cuyo fin o curación no puede preverse claramente o no ocurrirá nunca. Aunque no existe un consenso acerca del plazo a partir del cual una enfermedad pasa a considerarse crónica, por término medio se considera así toda enfermedad que tenga una duración mayor a tres meses.

A pesar de que los factores hereditarios también influyen en su desarrollo, se trata de aquellas dolencias que comúnmente se adquieren por medio de un estilo de vida inapropiado (consumo de tabaco, mala alimentación, inactividad física…).

La lista de enfermedades crónicas más prevalentes -con la salvedad del cáncer- son las enfermedades cardiovasculares, la diabetes, las enfermedades respiratorias, las enfermedades mentales y del aparato locomotor, como los problemas de columna y artrosis.

El seguimiento personalizado, clave del éxito. Los avances médicos y tecnológicos han alargado considerablemente la esperanza de vida. Esto, unido al envejecimiento de la población, ha hecho que aumente el fenómeno de la cronicidad de las enfermedades.
El seguimiento continuo y personalizado por parte del médico y el cumplimiento del tratamiento establecido por parte del paciente son factores fundamentales a la hora de hacer frente a cualquier dolencia crónica. Conocer la enfermedad y afrontarla de la mejor manera posible son pasos muy importantes para que el tratamiento sea lo más efectivo posible.

Mi enfermedad crónica, ¿se puede curar? ¿qué tipo de tratamiento tengo que seguir? ¿qué efectos secundarios tiene la medicación? ¿cuál es la mejor dieta para la dolencia que padezco? Estas son preguntas típicas que suelen formular con frecuencia los pacientes. Según Clara Esteban, responsable médica de Health Dialog España, empresa perteneciente al grupo matriz de Sanitas, “a menudo, los enfermos crónicos necesitan mucha información sobre su patología para aprender a gestionarla eficazmente, ya que las dudas y la desinformación pueden hacer que la calidad de vida del enfermo se vea afectada”.

Cómo afrontar una enfermedad crónica
Tiempo, paciencia, apoyo y ganas de participar en el cuidado de la propia salud son las exigencias principales que debe cumplir un paciente para aprender a vivir con una enfermedad crónica. Se debe convertir en un “paciente activo”, potenciando su participación en la toma de decisiones sobre su propia salud y enfermedad.


Según la doctora Esteban, “cuanto más aprenda el paciente sobre su enfermedad, más entenderá el tratamiento a seguir y las emociones que puede experimentar”. El enfermo crónico debe descubrir, por sí mismo, la mejor forma de crear un estilo de vida saludable basado en sus necesidades individuales “Ser un paciente activo consiste en optar por no ser un paciente de sino un paciente activo de, en tomar pequeñas elecciones que van en aumento y que pueden ayudar al paciente no sólo a recuperar la sensación de control sobre el tratamiento sino también sobre su vida”, añade Clara Esteban.

viernes, 22 de agosto de 2014

Verano y calor

Para minimizar los daños que el exceso de calor puede causar, principalmente en niños, ancianos, pacientes con patologías crónicas y personas que trabajan o realizan esfuerzos al aire libre, los responsables sanitarios nos recuerdan reiteradamente una serie de recomendaciones generales :

1. Beba agua o líquidos frecuentemente, aunque no sienta sed e independientemente de la actividad física que realice.
2. No abuse de los líquidos que contengan cafeína o grandes cantidades de azúcar ya que hacen perder más líquido corporal. Evite también el alcohol.
3. Aunque cualquier persona puede sufrir un problema relacionado con el calor, preste especial atención a bebés y niños pequeños, ancianos y personas con enfermedades que puedan agravarse con el calor y la deshidratación como, por ejemplo, las enfermedades cardíacas.
4. Permanezca el mayor tiempo en lugares frescos, a la sombra o climatizados. Refrésquese cada vez que lo necesite.
5. Reduzca los esfuerzos físicos en las horas de más calor (12.00 a 17.00 horas).
6. Use ropa clara, ligera, holgada y que deje transpirar.
7. Nunca deje a nadie en un vehículo estacionado y cerrado (especialmente niños, ancianos o enfermos crónicos).
8. Consulte a su médico ante síntomas que se prolonguen más de una hora y estén relacionados con las altas temperaturas.
9. Mantenga sus medicinas en lugar fresco, el calor puede alterar su composición y su efecto.

jueves, 21 de agosto de 2014

Verano y países exóticos

Antes de realizar un viaje a países tropicales es conveniente acudir a los centros especializados para recibir las vacunas requeridas según el país de destino y el tipo de viaje que se realice y conocer las medidas preventivas. Se deben extremar las medidas de higiene y vigilar la alimentación, así como utilizar repelentes, mosquiteras y ropa adecuada para evitar las picaduras de mosquitos

Se estima que por cada 100.000 españoles que viajan a zonas tropicales 50.000 tendrán algún problema de salud, 8.000 se encontrarán lo suficientemente enfermos como para acudir al médico durante su viaje, 300 serán hospitalizados durante el viaje o al regreso y uno fallecerá, según informa la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC).

Las infecciones representan la primera causa de morbilidad al regreso de un viaje al trópico, indican. Por este motivo, los epidemiólogos han querido hacer hincapié en la importancia de la prevención frente a las enfermedades tropicales, ya que alrededor de 1.000.000 de españoles viajan a algún país del trópico a lo largo del año, siendo la época estival el periodo en el que más desplazamientos se realizan a ese tipo de destinos: 506.000 a América Central-Caribe y Sur, 280.000 a África y 165.000 a Asia y Pacífico.

"El incremento en el número de viajeros, algunos de los cuáles padecen enfermedades crónicas o algún tipo de inmunosupresión, sumado a los inmigrantes, ha hecho que las infecciones tropicales sean cada vez más frecuentes en nuestro medio, y sean motivo de consulta en todos los niveles de nuestro sistema de salud: asistencia primaria, centros especializados y urgencias", explica el miembro de la SEIMC y jefe de la sección de Medicina Tropical del Hospital Clínic de Barcelona, el doctor Joaquim Gascon.

La malaria o paludismo, una enfermedad transmitida por los mosquitos, es la patología importada más relevante por su frecuencia y por su potencial gravedad, explican desde la SEIMC. De hecho, el 40 por ciento de la población mundial vive en zonas de riesgo de malaria (América Central y del Sur, Haití, África, Asia central-sur, Sudeste asiático y Pacífico Sur) y la prevalencia es de unos 500 millones de afectados por año.

Otras enfermedades que también son transmitidas debido a las picaduras de mosquito son el dengue, el chikungunya y la fiebre amarilla, entre otras. Para la fiebre amarilla existen vacunas pero para la mayoría de las infecciones transmitidas por mosquitos, como en el caso del dengue y del chikungunya, "no existen medidas específicas de prevención, por lo que se recomienda seguir algunas normas preventivas generales", subrayan los especialistas.

El estímulo que atrae al mosquito es el olfatorio pero también el visual y el térmico. La temperatura y la humedad corporal, así como la secreción de monóxido de carbono y el ácido láctico atraen irresistiblemente a los mosquitos así como los jabones, perfumes y cremas, por lo que los médicos indican que es conveniente evitar este tipo de productos "muy perfumados". "Se deben usar repelentes de mosquitos y preferiblemente ropa de color claro que cubra hasta las muñecas y los tobillos", aconsejan.
Diarrea del viajero

La diarrea del viajero es el trastorno de salud más frecuente en viajeros, según los expertos en Medicina Tropical. De hecho, de acuerdo con los datos de la SEIMC, entre el 40 y el 60 por ciento de los viajeros experimentan un episodio de diarrea durante el viaje. La higiene personal (lavarse las manos antes de las comidas) y la conducta alimentaria son dos factores "esenciales" para intentar evitar la diarrea del viajero. Asimismo, y según el tipo de viaje, es importante prever una forma de potabilización del agua que se va a consumir.

Otras infecciones que pueden adquirirse en viajes a países tropicales son las de transmisión sexual ya que en los viajes al extranjero son "más frecuentes" las relaciones sexuales con "desconocidos" y "se suelen utilizar poco los preservativos", comentan los epidemiólogos.

En cualquier caso, el doctor Gascon recomienda que "antes de realizar un viaje a países tropicales se acuda a los centros especializados para llevar a cabo algunas medidas preventivas" como la profilaxis antipalúdica (tomar fármacos preventivos); usar repelentes, mosquiteras y ropa adecuada para evitar las picaduras de mosquitos y recibir las vacunas requeridas según el país de destino y el tipo de viaje que se realice.

Por otra parte, los médicos también aconsejan tener precaución a la hora de ingerir alimentos -deben estar siempre bien cocinados-, así como lavarse las manos antes de manipular cualquier alimento y beber sólo bebidas embotelladas; hacer uso del preservativo en caso de tener relaciones sexuales con una pareja "no habitual"; evitar el contacto con agua de ríos y lagos donde haya riesgo de esquistosomiasis y disponer de un seguro médico que cubra cualquier emergencia.

Además, según los expertos, es necesario acudir de nuevo al médico a la vuelta del viaje cuando Se ha incurrido en algún tipo de riesgo para adquirir enfermedades, como bañarse en ríos o lagos y cuando se ha sufrido la mordedura de algún animal, o si se manifiesta algún tipo de problema de salud como fiebre, diarrea o lesiones cutáneas.

miércoles, 20 de agosto de 2014

Verano y síndrome de la clase turista

En los últimos años ha cobrado vigencia una realidad largo tiempo conocida por los expertos en Flebología y Cirugía Vascular: la aparición de trombosis venosas profundas (TVP) asociadas a los viajes de larga distancia. Es lo que se denomina “trombosis del viajero”. Ahora que comienzan a prepararse los viajes estivales, el fantasma de esta patología planea sobre los viajeros…

El también conocido como Síndrome de la Clase Turista es una patología venosa asociada a los viajes que está reconocida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como riesgo global para la salud, con manifestaciones que varían desde molestias leves como edema, entumecimiento, hormigueo en miembros y cansancio en general, hasta otras más graves (trombosis venosa profunda y embolia pulmonar) que incluso pueden provocar la muerte. ¿Es posible prevenir esto?

Para el doctor Fidel Fernández, “entre las causas de este tipo de patología destacan la inmovilidad prolongada, compresión venosa por sedestación y alteraciones de la coagulación en relación con condiciones de presurización de cabina”, señala el experto. En cuanto a su aparición, “no es exclusiva de los pasajeros que viajan en clase turista; puede aparecer en cualquier clase, ya que está más bien relacionado con las condiciones de la cabina (baja presión atmosférica, baja presión de oxígeno, baja humedad relativa…) y sobre todo con la limitación prolongada de la movilidad y las alteraciones, conocidas previamente o no, de la coagulación”, añade el conferenciante.

Este padecimiento afecta al 3% de los viajeros sanos que realizan vuelos de más de 4 horas de duración, lo que significa 1 de cada 6.000 viajeros sanos. A ellos hay que sumar una proporción considerable de personas con patologías o con mayor riesgo de sufrir problemas de obstrucción venosa tales como obesos, mujeres embarazadas, enfermos crónicos del corazón, pacientes tumorales y diabéticos. Por otra parte, uno de cada cinco pasajeros de un avión padece una hinchazón de piernas sin que ello suponga la existencia de dicha trombosis.

El caso de Heathrow

“Desde los años sesenta existen comunicaciones médicas que registran cuadros de trombosis tras los viajes transoceánicos. Ya en los años setenta se acuñaron términos tales como trombosis del viajero, economy class o síndrome de la clase turista. Todo ello cobró importancia mediática con el fallecimiento de una joven galesa de 28 años, Emma Christofferson, que sufrió una embolia pulmonar masiva al llegar a Heathrow mientras esperaba sus maletas tras un vuelo desde Australia. No es, por tanto, un fenómeno nuevo”, precisa José Román Escudero, presidente del Capítulo Español de Flebología. Además, “dos vicepresidentes de EE. UU., Dan Qualey y Dick Cheney, también han sufrido esta enfermedad volviendo de Asia en viajes de trabajo”, añade Fernández.

martes, 19 de agosto de 2014

Verano y dieta

Traemos a nuestras páginas este artículo que el Dr. Gaspar García, director del Área de Educación para la salud del Colegio de Médicos de Málaga, me hizo llegar hace unos años para su divulgación y que, como puede apreciarse, no ha perdido un ápice de actualidad.

LA DIETA DE LA MITAD (Esta sí que es una dieta milagro)

El deseo de lucir un cuerpo bonito en el verano puede llevar a algunas personas a acudir a las famosas “dietas milagro” o a restringir los alimentos de forma drástica (dieta del pomelo, etc.). La tan nombrada en los medios de publicidad “operación bikini” puede hacer que muchas mujeres, en especial jóvenes y adolescentes se obsesionen en adelgazar rápidamente, y, sin acudir a ningún tipo de profesionales alteren completamente su hábitos alimenticios, no tomando en cuenta las posibles repercusiones.

En personas sanas y estables hacer una breve dieta o depuración a base de frutas de una o dos semanas puede no tener consecuencias negativas, incluso llegar a ser beneficioso. Pero cuando en ciertas personas existen de base unos factores de vulnerabilidad como son la baja autoestima, la obsesión por un cuerpo delgado, el perfeccionismo, la auto exigencia extrema, desequilibrios emocionales y conflictos familiares, etc., realizar dietas adelgazantes con la consecuente pérdida de peso puede llegar a desencadenar la aparición de importantes trastornos alimentarios.

El efecto rebote. La AEDN (Asociación Española de Dietistas-Nutricionistas) se ha mostrado muy contundente afirmando que el 95% de las personas que pierden peso de forma rápida mediante la famosas “dietas milagro” vuelven a recuperar su peso debido al efecto rebote o yo-yo. En este tipo de dietas se suelen restringir determinados alimentos que son esenciales para el correcto funcionamiento del organismo. Generalmente son ricas en proteínas de origen animal y grasas saturadas, presentando grandes carencias de vitaminas y minerales. Estas dietas favorecen la pérdida de peso a expensas de la masa magra corporal, líquidos, reservas de glucógeno y en un muy pequeño porcentaje de gras, que sería lo más necesario.

Según los especialistas las razones principales por las que se produce el efecto rebote es por la necesidad de una sobre ingesta para compensar el anterior periodo de restricción. Además para contrarrestar la deficiencia energética que existe durante la época restrictiva, el organismo reduce su metabolismo para gastar menos. Cuando la dieta finaliza, la mayor lentitud metabólica hará que los alimentos nos engorden más, y una buena parte de ese peso recuperado se almacenará en forma de grasa corporal.
Si queremos perder peso de forma efectiva y saludable lo mejor es seguir bajo la supervisión del médico o especialista una dieta a medio y largo plazo, que sea rica y variada, restringiendo la energía que se ingiere en las comidas de forma adaptada a la composición corporal y al metabolismo. Un deportista requerirá de unas necesidades nutricionales diferentes a las que pueda necesitar una persona más sedentaria. La dieta debe ser personificada. A lo largo de las diferentes etapas de la ida vamos necesitando en mayor o menor medida de determinados elementos nutricionales para mantenernos en el peso adecuado para mantener una buena salud.

La dieta de la mitad. Habiendo dicho todo esto en contra de las Dietas Milagros, si debo confesar que hay una en la que de verdad creo: La Dieta de la Mitad. La verdadera dieta milagro: comer la mitad de lo que normalmente comemos. Para empezar lo primero que debe hacer, durante tres o cuatro días, incluso una semana, es llevar siempre con usted una pequeña libreta en la cual deberá anotar todo que coma o beba, a qué hora lo hace y en qué cantidad. Una vez escrito en el papel será muy sencillo darse cuenta la cantidad de alimentos que ingerimos y ese es el primer paso para… reducirlo a la mitad. Si tomó un potaje de garbanzos con el plato lleno… pues ahora tendrá que servirse medio plato; si tomó dos filetes de bacalao con tomate, ahora tendrá que tomar uno y con la mitad de salsa; y si tomó dos copas de vino con la comida o con los amigos ahora tendrá que tomar sólo una. Si usted desea eliminar el sobrepeso de una forma efectiva, no haga trampa. De todo cuanto usted ingiera diariamente, ahora tome sólo la mitad. Excepto agua natural sin gas que podrá tomar toda cuanto desee.

Es importante asegurarse de tomar las proporciones adecuadas de las diferentes clases de alimentos: 15-18% de proteínas, alrededor de 55% de Hidratos de carbono, 25-30% de grasa de origen vegetal.
Organizar los horarios de las comidas. Orden y rutina. Los expertos aconsejan comer cinco veces al día. No se trata de aumentar las calorías sino de repartirlas adecuadamente. Un desayuno completo, alguna fruta o frutos secos a media mañana, un buen almuerzo que incluya vegetales, pequeña merienda que incluya alguna fruta y nueces y por último una cena ligera, y de seguir la regla de “Cinco al Día”, que consiste en tomar dos o tres frutas al día, así como tres raciones de vegetales por lo menos.

Pero no sólo una buena dieta nos va a ayudar a perder peso, sino también el ejercicio regular y seguir toda una serie de consejos para modificar poco a poco y de forma positiva nuestro estilo de vida. En la página web dedicada a la educación y promoción de la salud www.salusline.com

Cuerpo delgado no es sinónimo de belleza ni de salud. Cada persona tiene un peso ideal de acuerdo a su constitución. Para alcanzarlo hay que ser paciente y persistente, haciendo día a día esos pequeños cambios en nuestros hábitos que nos van a llevar a tener una vida más sana y feliz.

lunes, 18 de agosto de 2014

Verano y obesidad (2)

En la obesidad intervienen numerosos factores tanto genéticos como hormonales y nutricionales, así como influencias ambientales y psicosociales. Aunque los genes juegan un papel importante en la regulación de la masa corporal, no es posible explicar la reciente aparición de obesidad en el mundo occidental mediante cambios genéticos en la población. Es más probable que la obesidad ocurra en aquellos individuos genéticamente predispuestos expuestos a condiciones ambientales “obesógenicas”, tales como dieta hipercalórica y marcado sedentarismo.

Los malos hábitos alimenticios, propios de sociedades consumistas, pueden desembocar en obesidad y sobrepeso, consideradas la “epidemia” del siglo XXI. Los pacientes obesos fallecen antes debido a enfermedades cardiovasculares, hipertensión y diabetes. Además la obesidad se asocia a alteraciones cerebrovasculares, respiratorias y osteoarticulares e incluso determinados tipos de cáncer. El sobrepeso también produce un estigma social importante debido a la marginación social asociada a depresión. Por ello, la identificación de tratamientos efectivos para la obesidad tendría un impacto directo, no sólo en la salud física de estos pacientes, sino también en su integración social y salud mental.

La regulación del apetito es un proceso muy complejo que ha sido objeto de una exhaustiva investigación en la última década. Los avances al respecto incluyen el descubrimiento de hormonas implicadas de forma opuesta en la regulación del comportamiento alimentario, como la ghrelina y la leptina. “Mientras la primera, sintetizada fundamentalmente por el estómago y el duodeno, se encarga de despertar nuestra sensación de apetito; la segunda, hormona producida por el tejido adiposo (conocido vulgarmente como grasa) inhibe las ganas de comer. Ambas señales actúan directamente sobre el hipotálamo, regulando la ingesta”, comenta Miguel López.


Para contribuir a la prevención de la obesidad, los expertos del CIBERobn recomiendan hábitos alimenticios más saludables como servir porciones pequeñas de cada alimento, comer variado, evitar el abuso de platos con exceso de grasa o carbohidratos, y procurar no disponer constantemente de alimentos a la vista.

domingo, 17 de agosto de 2014

Verano y obesidad (1)

La extensión de la ambigüedad en el uso del Hambre y Apetito se refleja incluso en las definiciones que recoge la Real Academia Española (RAE) al referirse al “hambre” en su primera acepción como la “gana y necesidad de comer”, la “escasez de alimentos básicos, que causa carestía y miseria generalizada” en un segundo significado y como sinónimo de apetito en el tercero. “Apetito”, por otra parte, lo explica como el “impulso instintivo que lleva a satisfacer deseos o necesidades” y en una segunda acepción como “gana de comer”. Definiciones en las que ya queda patente la distinción en función del componente hedonista.

La fraseología popular también ha contribuido a modelar y asentar la confusión a lo largo de la historia. “Me muero de hambre”; “Ser más listo que el hambre”; “Juntarse el hambre con las ganas de comer”; “Comer a alguien con los ojos”; “Huele que alimenta”, etc. son algunos ejemplos que hacen referencia, aunque no de forma expresa, sí en sentido figurado, al hambre y permiten atisbar un uso ambiguo del término al otorgarle acepciones placenteras más propias del apetito.

Aunque parecen lo mismo, estos términos tienen significados y matices dispares. Investigadores del Centro de Investigación Biomédica en Red-Fisiopatología de la Obesidad y la Nutrición (CIBERobn) nos aclaran sus principales diferencias, identifican los factores que intervienen en ellos y nos presentan algunas recomendaciones para dominar el apetito que pasan por una combinación mesurada de la ingesta calórica, hábitos alimenticios saludables y la práctica de ejercicio físico.

¿Necesidad fisiológica o placer? Según Miguel López, del grupo del CIBERobn de Santiago de Compostela, coordinado por Carlos Diéguez, “tener hambre” es una necesidad fisiológica vital, indispensable no sólo para saciar el hambre, sino para nutrir nuestro cuerpo con micronutrientes, como algunas vitaminas, minerales y macronutrientes, como proteínas, grasas y carbohidratos presentes en cualquier alimento”. En cambio “tener apetito” significa el deseo de comer por placer, en el que intervienen factores como los olores, sabores, el aspecto y presentación de los alimentos o ciertas costumbres alimenticias que estimulan nuestra mente para fomentar una necesidad, la de comer, que, en realidad, ya estaría satisfecha.

En la sociedad actual y avanzada, el problema radica precisamente en el exceso de oferta y consumo de alimentos, lo que conlleva un incremento del consumo de calorías que, sumado al incremento del sedentarismo, deriva en el acumulo de dichas calorías en forma de grasa. Es decir, el sobrepeso y la obesidad se producen cuando existe un balance energético positivo como resultado de un desequilibrio entre ingesta calórica. O lo que es lo mismo, la cantidad de energía que ingerimos con los alimentos y el gasto energético. El sobrepeso y la obesidad aparecen cuando el número de calorías ingeridas sobrepasa, de manera crónica, al número de calorías consumidas.

Los ciclos del apetito
Existen tres conceptos interrelacionados que intervienen cíclicamente en el apetito: hambre, satisfacción y saciedad. El hambre es la sensación fisiológica que induce a comer; la satisfacción el estado de plenitud que invita a dejar de comer y la saciedad el período durante el cual la sensación de satisfacción se mantiene hasta que aparece de nuevo el hambre.
Toda la información periférica procedente de los depósitos grasos, niveles de glucosa en sangre y del tracto digestivo es recibida, analizada y procesada por determinadas neuronas (células nerviosas) en el encéfalo. En concreto, la región cerebral de mayor importancia para la regulación de la ingesta es el hipotálamo, situado en la parte mediobasal del cerebro. “Aunque el control hipotalámico de la ingesta es muy preciso, se ve influenciado por factores hedónicos, relacionados con el placer por la comida y también por el acto social que supone comer”, señala Miguel López.

Es bien sabido que hay alimentos que “enganchan”, comidas a las que no podemos resistirnos, como el chocolate, los dulces, los aperitivos, las grasas saturadas o el café. Esto se debe a que su ingestión estimula zonas cerebrales implicadas con la adición y mecanismos cerebrales de recompensa. De ahí que sucumbamos a sus encantos con mayor devoción cuando nos encontramos bajos anímicamente.

Esta es la razón por la cual el incremento del consumo de estos comestibles o “manjares” está más relacionado con la satisfacción por comer, que con la simple necesidad vital de ingerir calorías. “Además de sus efectos sobre la masa y salud corporal, los excesos apetitivos típicos de sociedades desarrolladas”, según apunta Miguel López, “acabarían provocando una adicción, al igual que sucede con las drogas o los juegos de azar”. Un fenómeno que algunos teóricos denominan como “hambre hedonista”.

sábado, 16 de agosto de 2014

Verano y ardor de estómago

Actividades como el comer, dormir, hacer deporte y practicar el sexo, que se supone que forman parte de los placeres de la vida para un gran parte de la población, son interrumpidas a diario por culpa de la pirosis (ardor de estómago), síntoma que padecen más de 50 millones de europeos y que hace que el contenido ácido del estómago fluya al esófago causando una sensación desagradable de quemazón y sabor ácido. Unas vacaciones que se suponían iban a ser felices, pueden verse trastocadas por este problema.

Según un estudio pan-europeo, presentado hace unos años en la Semana de Patología Digestiva que se celebró en Atlanta (Estados Unidos), y en el que participaron más de 5.000 personas de Francia, Alemania, Italia, Suecia e Inglaterra, se concluía que la pirosis tiene un importante impacto en la vida diaria del 60 por ciento de los europeos que la padecen, incluyendo alteraciones en comer y beber (48%), dormir (16%), trabajo (9%) y práctica del deporte (12%). Los datos de la encuesta presentada concluyen que, para una de cada diez personas, la pirosis también afecta a su vida sexual.

En un grupo de casi 1.000 pacientes norteamericanos diagnosticados de pirosis, esta patología alteró de forma significativa su vida cotidiana en el 20 por ciento de los casos, según los resultados de un segundo estudio también presentado en esta reunión de Atlanta. Los problemas incluían pirosis producida por ciertos alimentos (81%), dificultad para dormir por la noche (49%), sensación de malestar (58%), falta de energía (41%), irritabilidad (55%) y frustración (55 %).

Los médicos e investigadores son conscientes del impacto que la pirosis produce en los que la padecen y que los pacientes con pirosis manifiestan un mayor malestar emocional que aquellos que padecen diabetes o hipertensión.

Afortunadamente, hay tratamientos eficaces. “A pesar del significativo impacto de la pirosis en la vida de muchos de los que la padecen, normalmente los pacientes desconocen que esta patología puede ser tratada fácil y eficazmente con medicamentos de prescripción”, ha manifestado el profesor Roger Jones, de la Facultad e Medicina Guy’s, King’s and St Thomas (Reino Unido), uno de los principales investigadores de este estudio europeo.

Entre un 11 y un 59 por ciento de los europeos que han respondido a la encuesta, creen equivocadamente que el cambio en la dieta y el estilo de vida es el tratamiento más eficaz de la pirosis, y únicamente de un 21 a un 49 por ciento conocen que existen medicamentos para su tratamiento.

“Desafortunadamente, muchos de los que padecen los síntomas de la pirosis tienen sus vidas seriamente alteradas porque desconocen que realmente lo que padecen es una patología que necesita un medicamento eficaz para su tratamiento. Los médicos pueden recetar tratamientos con IBP (inhibidores de la bomba de protones) altamente eficaces; en lugar de ello, los pacientes utilizan productos OTC (de venta sin receta) o realizan cambios en su estilo de vida”, ha comentado el Dr David Armstrong, de la Universidad de McMaster (Canadá), otro de los investigadores del citado estudio.

Las directrices internacionales sobre el manejo de la pirosis, recomiendan que todos los pacientes que la padecen sean tratados inicialmente con el tratamiento más eficaz disponible para parar rápidamente los síntomas y restaurar la calidad de vida. Una vez que los síntomas están adecuadamente controlados, los médicos pueden querer empezar a administrar dosis menores o un tratamiento menos eficaz.

viernes, 15 de agosto de 2014

Verano y seguridad al volante

El doctor de la Unidad de Alcohología del Hospital Clínic de Barcelona Antoni Gual ha declarado que "aunque exista un límite legal de alcoholemia para conducir, ello obedece básicamente a presiones económicas" ya que desde la "perspectiva científica, el riesgo se incrementa desde el primer consumo".

Gual incide en que "pequeñas dosis de alcohol ya producen una ligera sensación de euforia que al volante de un automóvil pueden conducir a la toma de decisiones erróneas" por lo que, a su juicio, no debería tolerarse ninguna tasa de alcohol en los conductores. Según explica el especialista, otro de los efectos del alcohol es la deshidratación, que en épocas estivales con altas temperaturas puede aumentar los efectos de los golpes de calor, por lo que no es recomendable utilizarlas para paliar la sed, incluso cuando se trata de bebidas con baja graduación como las cervezas.

"La cerveza es una bebida alcohólica que suele tener entre 4,5 y 7 grados, lo que significa que el alcohol constituye del 4,5 al 7 por ciento de su volumen, y su consumo incontrolado, como el resto de bebidas alcohólicas, aumenta la deshidratación, favorece la adicción y genera daños irreparables en el organismo", apunta el facultativo. Además, Gual señala que el alcohol disminuye la capacidad de resistencia del organismo por sus efectos sobre el metabolismo de los hidratos de carbono, sobre el sistema cardiovascular y sobre la capacidad de termorregulación.

"Los riesgos para la salud no derivan de la graduación de la bebida, sino de su contenido alcohólico y de la cantidad final de alcohol puro tomada", explica el médico, por lo que "cualquier bebida que contenga alcohol es siempre potencialmente peligrosa". Añade, además, que “el alcohol provoca básicamente una deshidratación intracelular, por lo que nunca veremos a deportistas utilizar ningún tipo de bebidas alcohólicas como bebida hidratante en el curso de las competiciones deportivas. Por el mismo motivo se recomienda no consumir bebidas alcohólicas cuando el organismo se halla sometido a fuerte insolación".

jueves, 14 de agosto de 2014

Verano, coche y carretera

Conducir a 120 kilómetros por hora con una mala visión multiplica por 10 el riesgo de sufrir un accidente de tráfico, por lo que es necesario someterse a una revisión visual completa antes de coger el coche.
Según indicó el presidente de la asociación, Javier Cañamero, "un 25,7 por ciento de los españoles entre 18 y 30 años nunca se ha hecho un examen visual". En este sentido, destacó que "la visión dinámica se ve obligada a adaptarse a un entorno rápidamente cambiante como consecuencia de la elevada velocidad", por lo que advirtió de que la presencia de un problema visual no compensado puede tener consecuencias "desastrosas".
Por otra parte, la asociación recuerda que la proporción de accidentes mortales crece notablemente durante la noche, donde se producen situaciones en que la carencia de iluminación llega a una proporción que multiplica por 4,5 la correspondiente a horas diurnas. Los expertos señalaron que La agudeza visual en visión nocturna se reduce un 70 por ciento, y el sentido de la profundidad es 7 veces menos eficaz por la noche que durante el día.

La asociación destacó que, debido a que el intervalo de tiempo transcurrido desde la percepción del acontecimiento hasta la respuesta motora debe ser el mínimo posible -la transmisión de las imágenes obtenidas por los ojos al cerebro suele tardar de 1 a 2 segundos, depende de cada persona-, es esencial que la agudeza visual del conductor sea la mejor posible.
Cañamero subrayó que "muchos conductores, con problemas en el cálculo de distancias, pueden presentar trastornos en este sentido que pasan desapercibidos porque no son tan evidentes como los problemas ópticos".

miércoles, 13 de agosto de 2014

Verano, refrescos y diabetes

Un estudio realizado por expertos de la Universidad de Boston y que ha sido publicado en 'Archives of Internal Medicine', advierte de que los zumos artificiales tienen el mismo riesgo que otros refrescos frente a patologías como diabetes y obesidad.
Según señalaron los responsables del trabajo, el público debería ser consciente de que estas bebidas no son una "alternativa sana" al resto de refrescos respecto al riesgo de padecer diabetes de tipo 2.
Los resultados del estudio, realizado en 44.000 mujeres estadounidenses, mostraron que los que bebían más de 2 refrescos al día tenían un 24 por ciento más de probabilidades de desarrollar diabetes de tipo 2 que aquellos que bebían menos de esa cantidad. Además, las mujeres que tomaban más de dos zumos tenían un 31 por ciento más de probabilidades, en comparación con las personas que consumían menos de una de estas bebidas al mes.
Los expertos explicaron que, a pesar de que algunos zumos de naranja y uva también contienen azúcar natural, puede que tengan un efecto metabólico distinto o es más probable que sean consumidos como parte de la comida. Además, señalaron que los refrescos y los zumos artificiales se toman habitualmente entre comidas y pueden llevar a "picar".

Por otro lado, un estudio publicado en la misma revista reveló que comer frutas y verduras protege de la diabetes de tipo 2, puede que evite el desarrollo de la obesidad y proporciona nutrientes como los antioxidantes.

martes, 12 de agosto de 2014

Verano, coche y perros

Viajar con un perro que se marea en el coche "puede llegar a desencadenar un problema de seguridad vial", según Pfizer Salud Animal, que ha cifrado en 200.000 el número de familias que se verán afectadas durante la operación salida de agosto por este tipo de problema. Según la compañía, el mareo es "un problema habitual" que afecta a uno de cada seis perros de todas las edades, aunque los más susceptibles a padecerlo son los cachorros y los perros más jóvenes. Los síntomas típicos son vómitos, náuseas, babeo, inquietud, ansiedad y temblor.
Según indican, "los perros que se marean al viajar muestran una combinación de movimiento, estrés y ansiedad incontrolados" que puede distraer al conductor y desencadenar un accidente. De hecho, "la falta o escasez de atención interviene en casi la tercera parte de los accidentes".

Dejar la ventana parcialmente abierta para que al animal le dé el aire durante el viaje, evitar los frenazos y los acelerones, hacer paradas para pasear al perro y darle de beber o acostumbrar a la mascota a utilizar el coche comenzando con viajes cortos y haciendo gradualmente viajes más largos, son algunos de los consejos para evitar el mareo. Por otra parte, se recomienda asociar el coche con una actividad agradable, como por ejemplo un paseo en el lugar de destino, mantener una temperatura óptima dentro del vehículo, y hacer que los primeros viajes sean lo más agradables posible y sin estrés para los cachorros.

lunes, 11 de agosto de 2014

Verano y dieta mediterránea

Según un informe de la FAO, la "creciente prosperidad" de la población en Europa meridional, el norte de África y Oriente próximo está propiciando que la dieta basada en frutas y verduras frescas se haya sustituido por alimentos "demasiado grasos, salados y dulces".

El cambio en los hábitos alimenticios y un mayor consumo de carnes y grasas, ricas en calorías, están provocando un "rápido deterioro" de la dieta mediterránea en los países europeos como España de donde es propia, según se desprende de un estudio de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).
Según este informe, la "creciente prosperidad" de la población en Europa meridional, el norte de África y Oriente próximo está propiciando que la dieta basada en frutas y verduras frescas se haya sustituido por alimentos "demasiado grasos, salados y dulces", explicó el autor del estudio, Josef Schmidhuber. Esto provoca que la dieta mediterránea haya "decaído y se encuentre en estado moribundo".
De hecho, entre 1962 y 2002 la ingesta diaria de calorías en Europa creció un 20 por ciento y pasó de 2.960 a 3.340 kilocalorías. Sin embargo, en Grecia, Italia, España, Portugal, Chipre y Malta, que inicialmente eran países más pobres que sus vecinos del norte, el aumento del consumo de calorías fue del 30 por ciento.
Esto ha provocado, por ejemplo, que Grecia sea hoy el país de la Unión Europea con la media más alta de Índice de Masa Corporal (IMC), y cuente con la tasa más alta de sobrepeso y obesidad.
Además, más de la mitad de los italianos, españoles y portugueses sufren igualmente de sobrepeso, quizá relacionado con el "notable incremento de calorías y carga glicémica" que se ha producido en las dietas de los residentes del Norte de África y Oriente próximo.

Ante el aumento de casos de obesidad, la FAO y la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomendó que los lípidos no sobrepasaran el 30 por ciento del total del aporte energético de la dieta. Sin embargo, en Grecia, Italia y España, donde la grasa constituye el 40 por ciento de la dieta.

Schmidhuber atribuyó estos cambios en los hábitos alimentarios a la mayor renta per cápita de los ciudadanos, pero también a factores como el desarrollo de los supermercados, los cambios en los sistemas de distribución de alimentos, el hecho de que las mujeres trabajadoras tengan menos tiempo para cocinar, y a la costumbre de comer con mayor frecuencia fuera de casa, a menudo en establecimientos de comida rápida.
Al mismo tiempo las necesidades de calorías han disminuido, "la gente realiza menos ejercicio y se ha pasado a un tipo de vida mucho mas sedentario".
Sin embargo, y quizá motivados por este "deterioro", hace unos años España buscó el apoyo de la Unión Europea para proponer que la dieta mediterránea se incluyera como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la UNESCO, basándose en su "tradición milenaria" como alternativa para combatir problemas de salud como la obesidad o las enfermedades coronarias.

Además, la importancia de esta iniciativa radicaba en el "alto interés económico" para España y las numerosas del sector dedicadas a producir alimentos característicos de dicha dieta, como son los cereales, el aceite de oliva, las frutas y verduras, y el sector vitivinícola.