Para el profesor Enrique Dávila, del Mount Sinaí Medical Center, en Miami (Estados Unidos), la investigación genética en cáncer “va a permitir la identificación final de ese 10 por ciento de casos que son genéticamente determinados”. Hay, en su opinión, un grupo de personas que tiene claramente un componente genético que les predispone a desarrollar el cáncer de mama y hay otro grupo más amplio en el que los factores ambientales van a influir. Sin embargo opina que no es la dieta uno de esos factores , ya que no hay ningún estudio científico que demuestre una relación causa-efecto entre un determinado tipo de dieta y el desarrollo de cáncer.
Refiriéndose a la situación entre negros y blancos que se da en algunos países, como Estados Unidos, indica que cuando se haya descifrado todo el código genético se verá que, por ejemplo, puede haber más diferencias entre dos personas de la misma raza que entre dos personas de razas diferentes. Al final “la única diferencia real será el color de la piel”.
2 comentarios:
La inhibición de PARP, un nuevo camino para evitar el crecimiento de las células tumorales, aumenta la eficacia de la quimioterapia en las pacientes con cáncer de mama no sensible a tratamientos hormonales ni antiHer2.
La inhibición de PARP, un nuevo camino para evitar el crecimiento de las células tumorales, aumenta la eficacia de la quimioterapia en las pacientes con cáncer de mama no sensible a tratamientos hormonales ni antiHer2.
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