jueves, 15 de mayo de 2014

Acertar con la marca

(AZprensa) Bautizar a un nuevo producto con un nombre comercial atractivo, fácil de recordar es una tarea harto compleja. Normalmente los laboratorios farmacéuticos cuentan con laboratorios de marcas, es decir, una serie de marcas registradas que podrán luego adjudicar a cualquiera de sus nuevos productos. De esta forma, cuando por fin está todo listo para el nuevo producto se elige entre una de esas marcas disponibles. Cualquier compañía lo que intenta es tener la misma marca en todos los países, pero esto no siempre es posible porque n muchas ocasiones uno de esos nombres –o alguno parecido- ha podido estar registrado por otra compañía en algún país y esto desbarata los planes haciendo, con frecuencia, que un mismo medicamento haya de ser conocido con distintos nombres según el país de que se trate. Un ejemplo de esto lo encontramos en el antialérgico Mircol (mequitazina); si bien este es su nombre comercial más extendido, en otros países ha debido cambiar dicho nombre, por ejemplo, Instotal en Argentina, Metaplexan en Alemania, Vigigan en Suiza, o Primalan en un puñado de países como Francia, Portugal, Reino Unido, Brasil, etc.

No hay comentarios: