(AZprensa) “En patologías crónicas con períodos clínicamente silentes como el asma, la falta de
adherencia a la medicación permite la progresión de la enfermedad y su control
inadecuado. Por eso es importante que el clínico esté entrenado para comunicar
al paciente lo que este necesite saber sobre su enfermedad y el tratamiento.
Cuanto menor sea el número de inhaladores necesarios y más se facilite su pauta
de administración, mejores serán, previsiblemente, los resultados. En este
sentido, la terapia única en el manejo del asma puede ofrecer ventajas para un
adecuado control de estos pacientes”, según Esteban Morcillo, catedrático de
Farmacología de la Universidad de Valencia.
Y tan importante como un buen tratamiento es una buena
comunicación: “Me parece muy conveniente que los médicos desarrollen
habilidades de comunicación” ya que “estas habilidades permitirán mejorar la
comprensión de la enfermedad por los pacientes y también la terapéutica
farmacológica lo que, en el caso de las patologías crónicas como el asma,
repercutirá en un mejor control de la enfermedad y un menor gasto sanitario”.
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