(AZprensa) Las diferencias
salariales entre los países europeos y los países asiáticos como China, han
hecho que miles de empresas europeas hayan optado por trasladar allí sus
fábricas con objeto de abaratar costes. Ya no sorprende a nadie mirar la
etiqueta del artículo de cualquier marca europea que se haya comprado y
descubrir que pone “made in China”.
Sin embargo esta tendencia parece
que ahora se va a revertir. Según ha informado “The Financial Times” la
compañía Adidas se está planteando traer de nuevo al mundo occidental sus
fábricas de oriente gracias a la puesta en marcha de fábricas europeas
altamente robotizadas, capaces de producir sus productos con una mínima mano de
obra. De hecho ya lleva unos meses ensayando estas cadenas automáticas de
producción en Alemania y tiene previsto igualmente llevar dicha experiencia a
Estados Unidos.
La robotización de la producción
va a generar más paro, tanto en oriente como en occidente, y esto es,
inevitablemente, algo que no parece tener remedio.
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