Bajas laborales por alergia

(AZprensa) La frecuencia de las enfermedades alérgicas (bien sean debidas al polen, al frío, a los ácaros, al polvo, a los animales,a los alimentos, etc.) ha mostrado un notable incremento en prevalencia y severidad en las últimas décadas, afectando en la actualidad a más de un 30% de la población en los países desarrollados. De hecho, existe una tendencia al alza de las enfermedades alérgicas cuyos motivos son multifactoriales, relacionados principalmente con el estilo de vida occidental.

La alergia reduce la productividad de quienes la padecen, y en algunos casos extremos produce incluso periodos de incapacidad temporal. Por ello  el objetivo es controlar los síntomas, encontrando los medicamentos más adecuados para cada persona, sin efectos indeseables, para que puedan realizar con normalidad todo tipo de actividades, incluyendo las laborales, sin que disminuya su concentración, ni el rendimiento en el trabajo.

Por ello los especialistas insisten en enviar un mensaje positivo a la sociedad, ya que vale la pena consultar al médico para que se identifique claramente la causa de la alergia y se establezca el tratamiento adecuado.