(AZprensa)
Según declaraciones del intermediario que trajo a Maradona a Europa, José María
Minguella, que recoge la prensa internacional, “Maradona no fue feliz en
Barcelona” aunque en ello tuvo buena parte de culpa la suerte. En su opinión no
se puede comparar a ambos jugadores, dos auténticos números 10, porque vivieron
en épocas completamente distintas.
La
experiencia de Maradona en Barcelona tuvo de todo menos suerte. En su primera temporada
una hepatitis le apartó varios meses de los terrenos de juego. En su segunda
temporada, en un partido contra el Athletic de Bilbao, el defensa Goikoetxea le
rompió el tobillo. Y para colmo, cuando ambos equipos se enfrentaron en la
final de Copa hubo algo más que palabras entre ambos y a Maradona le cayó una
sanción de tres meses. Todo este cúmulo de desgracias, unidas a la falta de
apoyo humano por parte del club –según expone Minguella- le impidieron brillar
en el Barcelona todo lo que de él se esperaba y precipitaron su marcha al
Nápoles.
Allí
fue todo diferente. Adorado e incluso idolatrado por el Nápoles, ganó títulos y
convirtió en uno de los grandes a un equipo que nunca había ganado nada. El
tiempo de fútbol que no tuvo en el Barcelona sí que lo tuvo en Nápoles (siete
años) y esto le permitió explotar deportivamente y ser el mejor.
Minguella
estuvo involucrado con el Barcelona desde comienzos de los años setenta y no
sólo trajo a Maradona, en un traspaso récord que supuso la friolera de 7,6
millones de dólares del año 1982, sino que también consiguió más tarde a otros destacados
jugadores como Romario o Stoichcov. En el caso de Messi, también estuvo
involucrado en su temprano fichaje a la edad de 13 años.
Como
la gente se empeña en comparar a Messi y Maradona, tiene que salir al paso y
recordarnos a todos que las épocas en que jugaron no son comparables: "En
la época de Maradona, los árbitros eran mucho más permisivos, todos los equipos
tenían a sus guerreros en el mediocampo y la defensa que de una manera u otra,
privaban a los oponentes de la oportunidad de mostrar sus habilidades", recuerda
Minguella. “Y luego estaba también la condición de la pelota, la calidad de las
botas, los campos de juego, que ahora son auténticas mesas de billar”.
En
cambio el caso de Messi sí ha sido diferente ya que contó desde el principio
con todo tipo de apoyo deportivo y humano, tuvo suerte con las lesiones y tuvo
el tiempo necesario para llegar a ser, hoy en día, el número uno.
“Castidad & Rock and Roll”: https://amzn.to/3tkj0eC
No hay comentarios:
Publicar un comentario