(AZprensa) La nave espacial Cassini, que fue lanzada en
1977, ha estado enviando información sobre Saturno y sus satélites desde el año
2004. Entre sus numerosas aportaciones al conocimiento científico destaca el
descubrimiento de un océano con actividad hidrotermal en Encédalo (uno de sus
satélites) y la constatación de la existencia de mares de metano líquido en Titán
(otro de sus satélites). Pero como todo en esta vida, también ha llegado el fin
para este proyecto de investigación espacial.
El próximo 15 de septiembre de 2017, la sonda Casinni se
dirigirá directamente a Saturno mientras envía toda la información que pueda,
relativa a la composición de este gigantesco planeta, hasta su destrucción
definitiva conforme se acerque al mismo. Sin embargo, y como prólogo a este épico
final, ha comenzado a realizar una serie de inmersiones (22 en total) entre sus
anillos, siendo la más espectacular la que realice el próximo 26 de abril
cuando se cuele entre Saturno (a sólo 98.000 kilómetros de sus nubes más altas)
y el primero de sus anillos, un espacio de sólo de 2.400 kilómetros de ancho.
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