España, sin libertad de prensa
(AZprensa) En España no existe la libertad de prensa.
Para comprobarlo sólo hay que echar cualquier día un vistazo a lo que dicen los
diferentes medios de comunicación y comparar eso con lo que dicen los medios de
comunicación de cualquier otro país europeo.
Desde el Gobierno se lucha denodadamente por imponer el
pensamiento único y los medios de comunicación actúan como cómplices,
transmitiendo las consignas del Gobierno. Se habla de lo que quiere el
Gobierno, se da el enfoque que quiere el Gobierno y se adoctrina a la población para que vaya asumiendo
esa forma de pensar; se llega a decir hasta lo que está bien (según ellos) y lo
que no, como si la población estuviese constituida por niños de tres o cuatro
años.
Pero ¿son iguales todos los periodistas? Evidentemente
no, pero la situación que hay es la que manda. Veamos: Ningún periodista puede
dar una noticia si antes no le ha dado el OK su Redactor Jefe. Y ningún
Redactor Jefe se atreve a sacar una noticia que vaya en contra de las directrices
que le ha marcado su Director. Y ningún Director se atreve a llevar la
contraria al Gobierno por las represalias (económicas y/o de otra índole) que
pudiera padecer.
Si un periodista prepara una noticia con un enfoque
contrario al pensamiento único, sus superiores le llamarán la atención y le
harán corregirla. Si reincide… ya sabe dónde está la puerta de la calle y la
oficina de desempleo más cercana.
Así las cosas, sólo aquellos periodistas que han creado
su propio medio digital, en el que ellos son los amos y deciden qué y cómo
contar, pueden llamarse independientes. Pero incluso en estos casos hay una
sombra: si ese medio tiene cierto éxito y necesita contratar uno o varios
colaboradores, como alguno de ellos se muestre contrario a sus ideas, será igualmente
despedido.
¿Dónde está pues el periodismo independiente?
Sencillamente, ha muerto.
El gran ensayo de manipulación de las masas...
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