(AZprensa) Según la Organización Mundial de la
Salud (OMS), más del 40 por ciento de las prescripciones de antibióticos son
inapropiadas, sobre todo aquellas relacionadas con el resfriado común y el
dolor de garganta, ya que en estos procesos los antibióticos no tienen ningún
efecto beneficioso.
El principal problema de este abuso en su
prescripción es que favorecen la aparición de resistencias, las cuales ya son
responsables –en el momento actual- de más de 25.000 muertes al año en la Unión
Europea y alrededor de 700.000 en todo el mundo; es decir, más de 700.000
personas mueren al año porque las bacterias han encontrado la forma de hacerse
resistentes a los antibióticos, gracias –en gran parte- al uso indiscriminado
y/o abusivo de los mismos.
Hacer buen uso de los antibióticos es imprescindible,
y por ello médicos, farmacéuticos y, en general todos los profesionales
sanitarios, deben recordar a todos los ciudadanos y en especial a los enfermos,
que los antibióticos sólo están indicados en las infecciones bacterianas (como,
por ejemplo, la neumonía) y, por supuesto, nunca deben tomarse sin la correspondiente
prescripción médica ya que, de hecho, las farmacias tienen prohibido dispensar
los mismos si no van acompañados de la correspondiente receta, algo que todavía
ignoran muchos ciudadanos.
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