(AZprensa)
Hace ya muchos años, cuando en la industria farmacéutica había libertad, imaginación
y creatividad, se entregó a los empleados de un laboratorio farmacéutico por
Navidad un tubo de Cecrisina efervescente que en su interior no contenía los clásicos comprimidos efervescentes de vitamina C sino cinco bolas
para adornar los árboles de Navidad y un prospecto que decía así:
CHRISTMACRISINA
BOLAS
Estimulante
de las defensas depauperadas
Composición:
2-metil-1-flúor-14-alfa-At.Bilbao-2-metil-llorona
en forma de bolas cristalizadas.
Características
generales:
El
empleo de la metil-llorona se remonta más allá del antiguo Egipto, y ya se
incluían de 15 a 900 millones de gramos en las tumbas de los faraones, que las
acogían con el natural regocijo (dentro de lo que cabe para su tez un tanto
sequilla).
Recientemente
el eminente investigador Dr. Casif ha descubierto que encasquetando un par de
metilos (de ahí su nombre: “metilos” = “los metí”), se obtenía mayor eficacia
terapéutica.
Con
el empleo de Christmacrisina bolas, por su acción anticabreriana de amplio
espectro, se obtienen biutiful resultados. En 20 (century fox) ensayos clínicos
realizados, merecen destacarse las siguientes propiedades: los mudos hablan, los
ciegos ven, los zurdos retornan a la derecha, las mujeres gastan menos (en un
0,1% de los casos), y hasta las pagas extraordinarias saben a más.
Indicaciones:
Tristeza,
decaimiento, surmenage, menaje a tres, stress, sdoss, malauvítis, aburrimiento,
cabreítis, etc.
Dosis
y modo de empleo:
Sáquense
las bolas del tubo (una vez quitado el tapón, ya que de no hacerlo así costaría
ímprobo trabajo). Admírense extasiándose en su contemplación durante cinco
minutos. Después colóquense en el lugar navideño más apropiado.
Presentación:
Tubo
con cinco bolas cristalizadas con grato color a naranja natural.
“La industria farmacéutica por dentro”: https://amzn.to/3tvDp0x
No hay comentarios:
Publicar un comentario