miércoles, 3 de julio de 2024

¿Qué ha sido de los dermatólogos?

(AZprensa) Los dermatólogos eran esos especialistas a los que acudíamos cuando teníamos algún problema de piel. Podía ser una dermatitis, un eczema, una urticaria… o algo más grave como psoriasis, lupus, etc.
 
Los dermatólogos atendían al paciente, examinaban sus lesiones cutáneas y diagnosticaban el problema, mandando a continuación un tratamiento y unos cuidados. De igual forma citaban al paciente para que acudiese a consulta al cabo de unos días para comprobar la evolución de las lesiones.
 
Eso era antes. Ahora los dermatólogos son seres invisibles e inaccesibles. Así es como está hoy en día la atención dermatológica en España:
 
1.- Cuando un paciente descubre que tiene una lesión dermatológica que requiera la atención de estos especialistas, tiene que llamar por teléfono para pedir cita. Un contestador automático le irá diciendo lo que tiene que hacer y al final, si hay suerte, le dará una cita para dentro de dos semanas.
No sabemos cómo aguantará esa lesión dermatológica esas dos semanas sin tratamiento, sólo en espera de que un dermatólogo la examine. No sabemos si esa lesión se curará sola en esas dos semanas o si irá a peor (que será lo más probable).
Pero esto no es lo peor, porque esa cita que le ha dado el contestador automático no es para un dermatólogo, sino para un fotógrafo. ¿Sí, has leído bien: para un “fotógrafo”!
 
2.- Ese día ansiado de la cita… con el fotógrafo, le harán varias fotos de las lesiones y se las enviarán a ese dermatólogo invisible e inaccesible.
 
3.- Después, el día que ese dermatólogo vea las fotos, decidirá –en base a las mismas- cuáles son los pasos siguientes: si hay que citarlo para una visita presencial dentro de varios meses o si se le manda una receta electrónica para que se aplique una crema.
 
Así las cosas, Dios quiera que tus lesiones dermatológicas sean de poca importancia y puedan resolverse con cualquier crema corticoide a base de hidrocortisona o triamcinolona (que no requieren receta y tú mismo puedes comprar en la farmacia) o bien con una crema que te receta de otro corticoide (de los que sí exigen receta) como fluocinolona, betametasona, etc.
 
Porque la situación es esta. Para una visita presencial tendrás que esperar varios meses, y esto en el caso de las aseguradoras privadas, porque si vas por la Sanidad pública la espera será aún mayor.
 
Ahora, cada vez más, los médicos no son personas sino –como mucho- una voz que se escucha al otro lado del teléfono. Así es esto tan bonito que han inventado de la “teledermatología” y que no es otra cosa que tener a los dermatólogos viendo fotos y unos contestadores automáticos hablando con los pacientes.
 

Vicente Fisac es periodista y escritor. Todos sus libros están disponibles en Amazon: https://www.amazon.com/author/fisac
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