Comparaciones demoledoras

(AZprensa) Hay comparaciones que resultan demoledoras porque nos ponen los pies en la tierra y nos demuestran que todo aquello que creemos grande o importante, que todo aquellos que somos o aspiramos a ser, que todo aquello que hemos logrado o podemos conseguir… es algo completamente insignificante. Veamos un ejemplo:
 
Si la tierra fuese una naranja (hacemos esta comparación para que te des cuenta de las proporciones) los primeros vuelos del ser humano alcanzaron una altura de… 2 centímetros. ¿Y el programa Apolo? Pues los vuelos hasta la Luna habrían sido como volar hasta una distancia de dos metros y medio de la superficie de la naranja.
 
Eso es lo más lejos que ha conseguido llegar el ser humano: 2,5 metros.

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