martes, 30 de marzo de 2021

Un satélite picado de viruela

(AZprensa) Algunos de los satélites que giran en torno a los planetas de nuestro sistema solar, tienen características muy peculiares, uno de ellos es Oberón. Este satélite de Urano es el segundo más oscuro (sólo por detrás de Umbriel) y es el número uno en cuanto a la multitud de cráteres qu muestra en su superficie; está tan acribillado a impactos que ha llegado al punto de saturación, esto es, cualquier nuevo cráter borra por fuerza uno anterior.
 
Oberón tiene la superficie más antigua de todos los satélites de Urano. El color de su oscura superficie es rojizo excepto en las zonas de depósitos de impactos recientes que muestran un tono gris o azulado. El tamaño de sus cráteres puede llegar hasta los 206 km. de diámetro y hay muchos más en la parte del satélite que mira a Urano; en muchos de estos cráteres el fondo es oscuro por los materiales depositados después. Tiene también muchos cañones (alguno de los cuales llega a los 537 km. de longitud) y laderas escarpadas con algunos picos que se elevan hasta los 11 Km. de altura, aunque el número de sus cañones es muy inferior al observado, por ejemplo, en Titania.
 
Está compuesto al 50% por hielo y roca, aunque se cree que también contiene compuestos orgánicos pesados que lo convierten en el satélite más denso de Urano. Entre el núcleo de roca y el hielo exterior puede existir una capa intermedia, de unos 40 km. de grosor de hielo parcialmente fundido al contener metano que actúa como anticongelante a pesar de la temperatura de dicha capa, inferior a –90º C. Ha estado formado, pues, y al igual que otros satélites de este mismo sistema, por dos fuerzas antagónicas: el bombardeo de meteoritos y los procesos geológicos internos.
 
Oberón es el segundo satélite más grande de Urano, con un diámetro de 1.522 Km. (sólo 55 km. menos que Titania); se encuentra a 583.519 Km. de Urano y tarda 13,4 días en completar cada órbita por lo que siempre ofrece la misma cara. Al igual que sucede en Urano, cada polo pasa 42 años en oscuridad y 42 años recibiendo luz solar, por lo que la temperatura media en la superficie externa del satélite es muy baja, de sólo –203º C.
 
Su órbita está parcialmente fuera de la magnetosfera de Urano por lo que, en ese periodo en que discurre fuera, está barrido en toda su extensión por el viento solar. En todos los satélites que orbitan Urano dentro de su magnetosfera, el hemisferio que queda a la espalda del movimiento de traslación del satélite es barrido por el plasma magnetosférico. Ese bombardeo supone el oscurecimiento de esos hemisferios ya que  esa especie de pulverización catódica descompone el agua y los compuestos orgánicos dando lugar a un material rico en carbono y de color oscuro. Como Oberón tiene parte de su órbita fuera de la magnetosfera, no se libra de ese bombardeo a diferencia de otros satélites.


"Curiosidades del Sistema Solar", de Vicente Fisac. Disponible en Amazon, en ediciones digital e impresa:

No hay comentarios: