(AZprensa) Le llaman “enfoque” aunque bien podría llamársele
“síndrome” porque es un mal que cada vez está más presente en nuestra sociedad
actual, me refiero al “enfoque” o “síndrome” de Dunning-Kruger. ¿Y qué demonios
es eso?
El estudio inicial fue realizado por David Dunning y Justin Kruger y se basa en la idea de que las personas de pocas luces intelectuales (vamos, los cortitos de inteligencia) no saben distinguir entre la “eficacia” y la “incompetencia”; en otras palabras, tienden a sobrevalorarse a sí mismas creyéndose que poseen grandes habilidades y conocimientos cuando en realidad son unos ignorantes y unos incompetentes.
Vista así la cosa ¿a que ya te resulta más familiar este concepto? ¿A que conoces a muchas personas que lo padecen? Y no digamos nada si miras al espectro político y compruebas la enorme incompetencia de muchos de los políticos que para desgracia de todos nosotros llevan las riendas del poder.
Afortunadamente no todos son así y hay algunas excepciones; por eso conviene que elijas bien a quien vas a votar en las próximas elecciones, guiándote no sólo por el cabeza de lista (que también en muchos casos padece el síndrome de Dunning-Kruger) sino por todos los que le acompañan en la lista. Y también conviene echar un vistazo a las decisiones y medidas que hayan adoptado (es decir: impuesto) en los últimos años.
Se dice vulgarmente “¡Dios nos libre de… tal cosa mala!”, pero en el campo de la política sólo un milagro podría librarnos de seguir gobernados por Dunning-Kruger.
El estudio inicial fue realizado por David Dunning y Justin Kruger y se basa en la idea de que las personas de pocas luces intelectuales (vamos, los cortitos de inteligencia) no saben distinguir entre la “eficacia” y la “incompetencia”; en otras palabras, tienden a sobrevalorarse a sí mismas creyéndose que poseen grandes habilidades y conocimientos cuando en realidad son unos ignorantes y unos incompetentes.
Vista así la cosa ¿a que ya te resulta más familiar este concepto? ¿A que conoces a muchas personas que lo padecen? Y no digamos nada si miras al espectro político y compruebas la enorme incompetencia de muchos de los políticos que para desgracia de todos nosotros llevan las riendas del poder.
Afortunadamente no todos son así y hay algunas excepciones; por eso conviene que elijas bien a quien vas a votar en las próximas elecciones, guiándote no sólo por el cabeza de lista (que también en muchos casos padece el síndrome de Dunning-Kruger) sino por todos los que le acompañan en la lista. Y también conviene echar un vistazo a las decisiones y medidas que hayan adoptado (es decir: impuesto) en los últimos años.
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