(AZprensa)
A las farmacias les cuesta trabajo adaptarse a los nuevos tiempos y en especial
a las nuevas vías de comercio que ha abierto la era digital y que ya es
imparable. Los datos hablan por sí solos. El 1 de julio de 2015 se abrió la
posibilidad de que las farmacias vendiesen a través de Internet, y mediante
autorización previa de Aemps, los medicamentos que no necesitan receta médica,
los llamados OTC. Esto suponía una gran oportunidad para las farmacias ya que
podían conseguir más clientes y encima para venderles productos con un margen
de beneficio mucho mayor que el de los medicamentos de prescripción.
¿Qué
ha pasado desde entonces? Pues un año después, en 2016 sólo 296 farmacias se
adaptaron para este canal de venta, lo que supone el 1,3 por ciento del total
de farmacias en España. Dos años después, en 2017 la cifra llegó a 402
farmacias (el 1,8 por ciento), y tres años después en 2018 esa cifra sigue sin
despegar y sólo son 480 farmacias (el 2,8 por ciento) las que venden este tipo
de productos por Internet, y eso a pesar que los Colegios de farmacéuticos
ofrecen ayuda a quienes quieran utilizar esta vía.
Mientras
tanto, el comercio digital crece a pasos agigantados, grandes compañías como
Amazon están dispuestas a entrar en este campo, las parafarmacias proliferan, los
grandes centros comerciales ya tienen su sección de parafarmacia, y 98 de cada
100 farmacias sólo venden a los clientes que llegan en persona a su
establecimiento y la venta de los otros medicamentos, los de prescripción, cada
vez son más baratos a causa de la creciente implantación de los genéricos por
lo que la cifra de negocio total y el beneficio derivado de la misma se
resiente.
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