(AZprensa)
El pasado 15 de mayo un asteroide pasó entre la Tierra y la Luna, a tan solo
200.000 kilómetros de nuestro planeta, prácticamente a mitad de camino entre la
Tierra y la Luna, sin que haya cundido la alarma entre la población.
Se
trata del asteroide 2010 WC9, descubierto el 30 de noviembre de 2010, por la
NASA, que ya advirtió no representaría ninguna amenaza para nuestro planeta aunque
no eran capaces de predecir entonces con exactitud a qué distancia se acercaría.
De hecho, hasta que no fue nuevamente detectado hace apenas 10 días no se pudo
establecer la distancia de aproximación.
Su
tamaño es de unos 50 a 120 metros y su velocidad de 12,8 kilómetros por segundo.
Para más tranquilidad, no volveremos a verlo hasta dentro de 200 años.
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