(AZprensa) Invitado por PSOE y Podemos, el farmacólogo
Joan Ramón Laporte, una de las figuras mundiales en el campo de la
farmacología, ha intervenido en el Congreso de los Diputados para hablar sobre
la vacunación por COVID-19. Al Gobierno le salió el tiro por la culata, porque
Laporte –quien reconoció no ser antivacunas, sino simplemente experimentado
farmacólogo- dijo cosas como estas:
“Estamos ante un experimento que atañe potencialmente a
la totalidad de la ciudadanía”
“Los ensayos clínicos, que son considerados la principal
fuente de pruebas sobre la eficacia
delos tratamientos, no muestran que las vacunas reduzcan la mortalidad”.
“Las vacunas Pfizer y Moderna no son vacunas, son
fármacos”.
Inmediatamente todos los palmeros del Gobierno (medios de
comunicación, algunos médicos, políticos, tertulianos, etc.) lo pusieron verde
y lo descalificaron, como si de cualquier tertuliano de televisión del tres al
cuarto se tratara.
Pero no, la noticia no es esta. La noticia es que Youtube
ha censurado el vídeo de su ponencia en el Congreso y no deja compartirlo en
Redes sociales como Twitter (ver imagen).
Más claro agua: Estamos en un Estado dictatorial donde no
se admite el pensamiento contrario a lo dictado por el Gobierno.
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