(AZprensa) En el año 1973 se estrenó la película “La noche americana”, en donde su director (que también trabajaba como actor, haciendo el papel de director) François Truffaut, nos enseñó qué era eso de “la noche americana”. Esta original película nos contaba una historia de cine dentro del cine, es decir, era una película que contaba la historia de cómo se hacía una película, y en ella utilizaban algo novedoso en aquella época: La “noche americana”.
Pero vayamos al grano ¿qué era eso? Se trata de poner sobre el objetivo de la cámara un filtro para oscurecer la imagen y así poder rodar en pleno día y hacer que parezca que se ha rodado de noche.
Desde entonces me he ido fijando en muchas películas para tratar de averiguar si en sus escenas nocturnas se utilizaba o no ese filtro. Ahora que ponen muchas películas antiguas en televisión, puedes comprobar (sobre todo en las películas malas) cómo se nota una barbaridad lo rudimentario de esa técnica. Aparenta ser de noche, pero las personas y los objetos proyectan unas sombras fuertes y muy bien definidas, algo que es incapaz de hacer la luz de la Luna por mucho que alumbre.
En fin, son curiosidades, ya digo, que ahora que veo películas antiguas en la tele, me llaman la atención y me traen a la memoria aquella segunda mitad del siglo XX en donde la gente era más feliz que ahora y la tecnología más infantil y rudimentaria.
Pero vayamos al grano ¿qué era eso? Se trata de poner sobre el objetivo de la cámara un filtro para oscurecer la imagen y así poder rodar en pleno día y hacer que parezca que se ha rodado de noche.
Desde entonces me he ido fijando en muchas películas para tratar de averiguar si en sus escenas nocturnas se utilizaba o no ese filtro. Ahora que ponen muchas películas antiguas en televisión, puedes comprobar (sobre todo en las películas malas) cómo se nota una barbaridad lo rudimentario de esa técnica. Aparenta ser de noche, pero las personas y los objetos proyectan unas sombras fuertes y muy bien definidas, algo que es incapaz de hacer la luz de la Luna por mucho que alumbre.
En fin, son curiosidades, ya digo, que ahora que veo películas antiguas en la tele, me llaman la atención y me traen a la memoria aquella segunda mitad del siglo XX en donde la gente era más feliz que ahora y la tecnología más infantil y rudimentaria.
Así se hablaba (y aún se conserva mucho de esto) en un lugar de La Mancha. Un libro prohibido para aquellos que no tengan sentido del humor.
“Diccionario Daimieleño – Español”: https://amzn.to/3qT88mu
“Diccionario Daimieleño – Español”: https://amzn.to/3qT88mu
No hay comentarios:
Publicar un comentario