(AZprensa)
Según se ha explicado en un encuentro sobre Genética y ELA organizado por la
Fundaicón Luzón y la Fundación Areces en el que han participado las principales
figuras mundiales en este campo, la exposición a pesticidas, metales y algunos
contaminantes podría incrementar el riesgo de padecer Esclerosis Lateral
Amiotrófica (ELA). En cualquier caso, los expertos insisten en que la evidencia
de la asociación entre exposiciones ambientales y la ocurrencia de ELA es
insuficiente, por lo que es necesario seguir trabajando para conocerla.
El
entorno del paciente, su estilo de vida (dieta, ocupación, tabaquismo), los
factores ambientales son factores que pueden tener una relación con el riesgo a
neurodegeneración. Sólo entre el 5 y 10% de los casos de ELA son hereditarios.
En el 95% de los pacientes, el origen no puede explicarse únicamente desde el
punto de vista genético y es necesario tener en cuenta al individuo y su
entorno. Son los casos denominados como “ELA Esporádica”.
Los
estudios genómicos realizados en los últimos años han permitido incrementar el
número de genes conocidos vinculados a la enfermedad, incluida en su forma
esporádica. De esta forme se está demostrando que los factores medioambientales
pueden influir en la epigenética del individuo, entendiendo por epigenética las
modificaciones que sufren nuestros genes a lo largo de la vida: envejecimiento
o exposición a agentes externos (fármacos, alimentación, tabaco, práctica
deportiva, etc.).
No hay comentarios:
Publicar un comentario