(AZprensa) Ya sabemos que algunos de esos que se llaman a
sí mismos “artistas modernos” suelen exponer en los museos algunas piezas que
en muchas ocasiones acaban en el cubo de la basura cuando las limpiadoras van a
hacer su trabajo y para ellas (al igual que para casi todo el mundo) esas “cosas”
no son arte sino basura que algún desaprensivo ha dejado en el museo. Pero en
esta ocasión no voy a hablar de eso sino de una hamburguesa (sí, una
hamburguesa real) que ha acabado convertida en pieza de museo y se puede
contemplar como tal en su urna de cristal. Esta es la historia…
Actualmente no está en un Museo (aunque sí uqe llegó a
estarlo) sino en un hotel (Bus Hostel Reykjavik), y no viene en las agencias
turísticas aunque cualquier turista curioso puede visitarla: se trata de la
última y única hamburguesa de McDonalds que se conserva en Islandia. Esta es la
historia:
El 31 de octubre de 2009 cerró el último McDonalds de
Islandia y entonces, Hjörtur Smárason compró la última hamburguesa que se puso
a la venta en ese establecimiento y no lo hizo para comérsela sino para
convertirla en pieza de museo. Y no es ninguna broma; durante algunos años
estuvo expuesta en el Museo Nacional, aunque después pasó a este hotel en donde
cualquiera puede acercarse a contemplarla, protegida bajo una quesera de
cristal.
Claro que si tú eres de esos que dice “no voy a viajar a
Islandia sólo para ver una hamburguesa”, no te preocupes, ya que para verla no
es imprescindible viajar a Islandia. Sólo tienes que hacer clik en el enlace
que ofrecemos al final y podrás acceder a la web de hotel en donde se muestra
esta hamburguesa (la única que queda en Islandia) y que lleva allí 14 años.
Acompañada de sus correspondientes patatas fritas, esta
hamburguesa no se conserva demasiado mal para todos los años transcurridos y de
ahí que hayan surgido leyendas que hablan de misterios en torno la conservación -cual momia egipcia- de esta
hamburguesa; no obstante, el profesor de Ciencias de la Alimentación de la
Universidad del Estado de Wayne, Yafan Zhang, explica que el responsable de su
excepcional estado de conservación es el propanoato de calcio, un conservante
que se utiliza en la bollería y la panadería, las carnes procesadas y algunos
lácteos.
En fin, tan insólita es Islandia que no sólo tiene una
hamburguesa como atracción turística sino que es el único país de Europa en
donde no hay ningún establecimiento de McDonalds.
¿Sientes curiosidad? Pues así está ahora mismo, en este
preciso instante, la única y última hamburguesa McDonalds de Islandia:
https://www.bushostelreykjavik.com/last-mcdonalds-in-iceland/
Un país que tiene mucho más que ofrecer, no sólo una simple hamburguesa, a todos los turistas.
“Reflejos de Islandia”: https://amzn.to/3lqpINE
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Un país que tiene mucho más que ofrecer, no sólo una simple hamburguesa, a todos los turistas.
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